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LAS NUEVAS CARRETERAS DE PEAJE DE MADRID

La R-5 quiere captar el 35% del tráfico de la autovía de Extremadura

El conductor de un turismo pagará tres euros por hacer el trayecto completo en hora punta

F. Javier Barroso

Cuando falte menos de un mes para las elecciones generales del 14 de marzo, los madrileños de la zona sur verán cómo se corta otra cinta de una gran obra de peaje proyectada por el ministro de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos. La R-5 será, junto con la R-3 (Madrid-Arganda del Rey) y la R-2 (Madrid-Guadalajara), la tercera autopista radial de peaje que podrán utilizar los conductores tras el pago de las correspondientes tarifas.

En este caso, se trata de casi 31 kilómetros que discurren entre el municipio de Navalcarnero y la M-40, en la capital. Los promotores calculan que absorberá el 35% del densísimo tráfico que soporta a diario la autovía de Extremadura (A-5), sobre todo para aquellos conductores que se dirijan a las zonas comerciales de Alcorcón, Móstoles o Arroyomolinos.

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Las empresas adjudicatarias de la R-3 y la R-5 -el consorcio Accesos de Madrid Concesionaria Española- han tenido que construir a cambio, gratis, el tramo oeste de la M-50, la tercera carretera de circunvalación de Madrid: 29,3 kilómetros libres de peaje que discurrirán entre Fuenlabrada, Leganés, Alcorcón, Móstoles, Villaviciosa de Odón, Boadilla del Monte, Majadahonda y Las Rozas.

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Cascos inauguró el pasado diciembre dos tramos de esta M-50, cuya conclusión depende de que sean terminados los túneles que discurren por el término de Boadilla del Monte y que durante su construcción se vinieron abajo. La empresa adjudicataria de la R-5 se encargará de la vigilancia y del mantenimiento de esta vía gratuita durante el periodo que dura la concesión (50 años, al igual que la R-3 y la M-50). Este periodo no empieza a correr desde que sean abiertas al público, sino desde el momento en el que fue adjudicado el proyecto a la compañía Accesos de Madrid Concesionaria Española, por lo que el retraso de unos dos años va en contra fundamentalmente de esta empresa.

La inversión en la R-5 ha alcanzado los 246 millones de euros. Además, está previsto que durante la fase de explotación sean creados 80 nuevos empleos. A éstos se unen los 110 que serán contratados en la R-3. Se encargarán de atender los peajes, de la limpieza y conservación de la vía y de solucionar en el menor tiempo posible las incidencias que afecten a la circulación. Los cálculos de ahorro de tiempo y de dinero en combustible son similares a los de la R-3: unos dos euros y unos cuarenta minutos en hora punta.

El peaje en el caso de la tercera radial de pago de la región resulta más caro que el de su hermana, la R-3. Los conductores de los turismos que quieran completar en hora punta los 30,9 kilómetros de que consta tendrán que pagar tres euros. Este precio llega a los 5,05 euros en el caso de los camiones de gran tonelaje. De nuevo, los usuarios gozarán de descuentos en el caso de que contraten con alguna entidad bancaria el llamado telepeaje (dispositivo que se coloca en el parabrisas y que permite el pago).

También ha habido quejas de los municipios por los que discurre esta obra. Alcorcón ha protestado porque le han dejado sin un acceso cercano pese a que la vía discurre a escasos 100 metros de su término municipal. Además, las constructoras han levantado un puente sobre la R-5 con una pronunciada pendiente en la carretera que une el municipio alcorconero con el parque de Polvoranca, en Leganés. Ese puente tan inclinado es utilizado por cientos de paseantes y ciclistas todos los días, en especial los fines de semana.

Esta nueva autovía nace con una alta siniestralidad laboral. El pasado mes de diciembre, cuatro trabajadores murieron en un accidente. Los operarios estaban dentro de una furgoneta Berlingo blanca cuando uno de los brazos de una máquina de asfaltar segó el vehículo y mató a los obreros. El accidente se produjo a las 19.40 en el kilómetro 6,500 de la futura R-5, en el término municipal de Leganés. Uno de los cuatro ocupantes permaneció con vida hasta que llegó el servicio de urgencias, pero murió a los pocos minutos como consecuencia de las graves lesiones que sufría. Los fallecidos tenían entre 40 y 50 años, según Emergencias 112.

Hasta ahora, el experimento de las radiales, que se proyectaron como el mejor remedio para acabar con los continuos embotellamientos en las autovías de entrada a la capital, está resultando un sonado fracaso. Así lo demuestran los datos que tuvo que facilitar Fomento a una pregunta parlamentaria del diputado socialista Francisco Javier García Breva sobre el número de usuarios que tuvo la R-2 (Madrid-Guadalajara) en sus primeros tres meses de funcionamiento. En total hubo 387.913 viajes, lo que supone una media diaria de 4.310 vehículos, incluidos los camiones (179 vehículos por hora).

La empresa concesionaria de la R-5 y la R-3 ha invertido 11 millones de euros en el respeto al medio ambiente. En el parque del Arroyo Butarque fue desplazado el trazado de la R-5 hacia el noroeste para lograr el mínimo impacto sobre el arroyo. Además, el ancho de la mediana se redujo a 10 metros entre ambos sentidos en el parque Regional del Guadarrama y en el parque de Arroyomolinos, al construir sendos viaductos de 361 y 288 metros, respectivamente.

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Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

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