Los empresarios piden que no se rebaje la capacidad de la carretera

Por Bracons o por Ripoll, pero Olot necesita acercarse a Barcelona. Ésta es la opinión mayoritaria de los habitantes de la Garrotxa y la que, con más o menos entusiasmo, defienden todos los grupos políticos. También lo ve así Jaume Font, vecino de la zona, profesor de Geografia de la Universidad de Barcelona y representante del Colegio de Geógrafos en la mesa de infraestructuras de la Generalitat.

Font considera "alarmante" el aislamiento de la Garrotxa y las dificultades que tienen sus habitantes y sus productos para llegar a Barcelona. "En el interior de Cataluña hay pocas ciudades dinámicas e industriales como Vic y Olot, y si no se las comunica bien, se quedarán atrás", advierte. Este geógrafo considera que la mejor opción para enlazar ambas ciudades es el proyecto que pasa por Bracons y asegura que "si se hace bien, no tiene que representar un gran impacto sobre el territorio".

Los empresarios de Osona, deseosos de contar con una nueva vía que los ponga a una hora de Francia, defienden el proyecto con gran entusiasmo. El presidente del Consejo Empresarial de Osona, Joan Rovira, reclama al Gobierno que "se ponga las pilas, porque gobernar no es hacer lo que quieren cuatro que hacen mucho ruido, sino emprender acciones que beneficien el futuro de las comarcas y de sus gentes". En el saco de lo que él llama "demagogia ecológica" también incluye al alcalde de Sant Pere de Torelló, Jordi Fàbrega, próximo a Iniciativa per Catalunya e impulsor de la orden de paralización de una parte de las obras.

Este alcalde, fraguado en reivindicaciones vecinales y ecologistas, pide un trazado menos agresivo para la carretera, aunque acepta que pueda pasar por su municipio y por la zona de Bracons.

El fiasco del Eix Transversal

Fàbrega celebra que, por primera vez, el Gobierno les haya escuchado. "Pese a ser el municipio más afectado por las obras, el anterior Gobierno nunca escuchó nuestras reclamaciones y ni tan sólo nos invitó a formar parte de la comisión de seguimiento". Concretamente pide que la carretera se desplace hacia el oeste en un tramo de unos cuatro kilómetros situado en la boca sur del túnel de Bracons. Se trata, según el alcalde, de una zona de gran valor ecológico, con importantes bosques de robles y hayas.

El alcalde del vecino Torelló, Miquel Franch (PSC), defiende la actuación de Fàbrega asegurando que "quizá no se estudió bien ni se tuvo la suficiente cautela a la hora de evaluar el impacto de la vía a su paso por Sant Pere de Torelló", pero reclama una decisión rápida para que no se encalle el proyecto.

Todos coinciden en que la decisión que se tome, sea la que sea, debe impedir otro "fiasco" como el del Eix Transversal, donde la falta de una doble vía causa constantes problemas y embotellamientos por el intenso tráfico de camiones.