El Ayuntamiento "hostigará" a los clientes de las prostitutas

El Ayuntamiento de Madrid planea dar un giro de 360 grados en las medidas que quiere adoptar con respecto a la prostitución. El concejal de Seguridad, Pedro Calvo Poch, reconoció ayer que está estudiando la posibilidad de implantar en Madrid el llamado modelo sueco con la adopción de medidas de "hostigamiento" sobre los clientes que demanden los servicios de las meretrices. Elena Arnedo (PSOE) e Inés Sabanés (IU) exigen una actuación global sobre los clubes de alterne y las mafias.

Tanto el actual alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, como el anterior gobierno municipal del PP se han manifestado en reiteradas ocasiones a favor de regularizar la prostitución, pero poniendo el acento en las medidas dirigidas directamente a las meretrices, como el acondicionamiento de una zona de la Casa de Campo o la restricción del tráfico en esa zona verde de la capital.

La novedad en el actual planteamiento municipal consiste en que, siguiendo el modelo vigente en Suecia desde 1999, considera que el comercio del sexo sigue la norma básica del mercado: la de la oferta y la demanda. Es decir, hay oferta de servicios sexuales porque hay clientes que los demandan. Con esa premisa, el Gobierno sueco optó por no perseguir a las mujeres u hombres que comercian con su cuerpo, sino a los clientes que pagan por esos servicios sexuales. Para ello se aprobó una ley que incluye desde sanciones económicas a penas de cárcel.

Los resultados de los cinco años que lleva en vigor esa ley serán expuestos el próximo jueves por la ministra sueca de Integración, Mona Sahlin, y el inspector jefe de la policía de Gotemburgo, Thomas Ekman. Pero antes de esa jornada el responsable de Seguridad en el gobierno municipal, Pedro Calvo, afirmó ayer que se las medidas que planea el Ayuntamiento no pasan por castigar al cliente, sino por ser "escrupuloso" a la hora de hacer cumplir las normas de circulación para dificultar su acceso con coches a las zonas donde se concentran las meretrices. "Yo me acercaría más a la palabra hostigamiento, entendiendo que toda labor de represión de la prostitución también iría acompañada de un apoyo social a la prostituta, que siempre es la víctima de esta situación", concretó Calvo. Según éste, para llevar a cabo ese hostigamiento no sería necesario cambiar la normativa actual, sino que bastaría con establecer una presencia policial permanente y reclamar la documentación de los clientes. La Concejalía de Seguridad actuará de manera coordinada con las áreas de Empleo y Servicios al Ciudadano, así como Economía y Participación Ciudadana.

La socialista Elena Arnedo (PSOE) e Inés Sabanés (IU) calificaron ayer las medidas anunciadas por Pedro Calvo como "insuficentes" y "oportunistas". "Es completamente parcial, coyuntural y propagandista de cara a las elecciones generales del 14 de marzo", señaló Arnedo a Europa Press. Según esta concejal socialista, para abordar el problema de la prostitución es imprescindible un esfuerzo en la inversión por parte de las administraciones para servicios tendentes a solucionar los problemas de las mujeres.

Sabanés, por su parte, considera que Calvo ha anunciado unas medidas que el gobierno municipal no podrá podrá cumplir: ¿cuántos policías van a poner para hostigar a los clientes?, preguntó Sabanés. "Lo esencial del modelo sueco es tener en cuenta el valor económico sumergido del negocio de la prostitución. Los servicios de lujo, los clubes de alterne, la publicidad que aparece en todos los medios, incluido Internet. Antes de realizar afirmaciones, como las de Calvo, desde la ingenuidad, hay que tener los datos del negocio y de las mafias", concluyó Sabanés.