Una firma austriaca adquiere la empresa vasca Babcock

La alemana Babcock Borsig y la austriaca ATB (Austrian Energy) llegaron en la madrugada de ayer a un acuerdo que cierra la última crisis del fabricante vasco de bienes de equipo Babcock Borsig España (BBE). El acuerdo, firmado la mañana de ayer, supone el pago de 100.000 euros por el 100% de las acciones, hasta ahora en poder de Borsig; el reconocimiento de que la transferencia de 1,7 millones de euros de la filial a la matriz es correcto; y el cese del actual director general, Enrique Palomino, cuya indemnización será abonada por el grupo alemán. ATB, con sede en Viena, cuenta con 3.500 trabajadores y las ventas de 2003 fueron de 640 millones.

El acuerdo de venta se cierra tras una semana en que el futuro de BBE ha estado en el aire tras el anuncio de la matriz alemana de que tenía otros dos compradores que ofrecían más: la noruega Enviroarc y la mexicana Ultramar.

La empresa alemana, en suspensión de pagos, asegura que su ley concursal les obligaba en defensa de sus acreedores a estudiar las nuevas ofertas. BBE sólo tenía liquidez para pagar los salarios hasta el mes de febrero. El grupo ATB había sido elegido comprador tras un proceso de selección apadrinado por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) en el que precisamente fueron descartados los dos nuevos ofertantes.

Visto bueno de la UE

El pacto alcanzado por ATB y SEPI, que cuenta con el visto bueno de la Comisión Europea, suponía la venta por un solo euro. Los movimientos de la semana pasada han llevado a que la empresa alemana logre mayores ingresos.

Sin embargo, Kramzlin, el negociador con plenos poderes de Borsig que cerró ayer la operación, aseguró que no entendía ni la posición sindical ni la de la SEPI, ya que la oferta de Enviroarc "era mejor". Tanto los representantes de los trabajadores como la sociedad pública aseguran no haber visto dicha oferta y han criticado las últimas maniobras de la firma alemana.

Los sindicatos pidieron ayer tanto a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales como a ATB que reúna en breve sendas mesas de negociación para explicar el plan sociolaboral, que supondrá la salida de un total de 240 trabajadores, y un nuevo proyecto industrial.

El resto del empleo (440 trabajadores) se garantiza durante cinco años. Ambas partes, a la espera de que previsiblemente el Consejo de Ministros apruebe la operación el próximo viernes, quieren reunirse con los trabajadores lo antes posible. SEPI, tras la aprobación del Gobierno, desbloqueará los 104 millones de euros de la privatización que dejaron de transferir a la empresa tras la declaración de suspensión de pagos de la matriz a los ocho meses de la privatización.

La sociedad pública vendió la firma a la sociedad alemana a fines de 2001. El proceso de saneamiento y privatización de Babcock ha costado a las arcas públicas 1.274,15 millones de euros.