Figueres muestra a un Dalí cotidiano visto por fotógrafos ampurdaneses

Salvador Dalí raramente tenía un no para un fotógrafo y siempre se sacaba de la manga poses grandilocuentes y extravagantes para alimentar su aureola mítica. No obstante, algunos fotógrafos locales le captaron en situaciones más cotidianas y espontáneas. En las 75 fotografías que hasta el 7 de marzo se exponen en el Museo del Empordà de Figueres, bajo el título Dalí a l'Empordà. La mirada dels fotògrafs empordanesos, puede contemplarse al genio surrealista comiéndose unos erizos ante unos pescadores, navegando en la bahía de Portlligat junto a Gala o pintando esforzadamente algunas telas. "Hemos querido presentar al Dalí más esencial frente al Dalí actor, a pesar de que en cualquier referencia fotográfica del pintor no se puedan evitar las imágenes de los típicos hechos dalinianos", explica Inés Padrosa, comisaria de la exhibición. La exposición fue inaugurada ayer por la consejera de Cultura Caterina Mieras, que manifestó que considera una deudas de su departamento la presencia y actividad del mismo en todo el territorio catalán y aseguró que a partir de ahora se tendrá más en cuenta a las comarcas.

El primer ámbito de la exposición presenta el Dalí espontáneo, con las imágenes menos estereotipadas de la cotidianidad del pintor. En una de ellas aparecen Dalí y Gala orando de rodillas en la iglesia parroquial de Sant Pere de Figueres. En otra, Dalí supervisa los lindes de su finca de Portlligat en compañía de un notario. En el apartado titulado Dalí en proceso de creación aparece documentada la ardua tarea de los concienzudos estudios preparatorios de algunos grandes cuadros. En otro ámbito se engloban imágenes de las diversas fases de creación del museo Dalí. Otras fotos lo muestran revisando las obras de construcción del Teatro Museo.

Con Amanda Lear

A pesar de su vocación cotidiana, la exposición no pasa por alto la vertiente pública del pintor. Un apartado se dedica a presentar a Dalí en compañía de algunos personajes públicos, como Humberto de Saboya, Amanda Lear, Severo Ochoa, Josep Tarradellas y varios integrantes de la sociedad figuerense. En una última parte de la exhibición, se recogen imágenes de distintas performances realizadas en Portlligat, algunas de ellas para anuncios publicitarios.

Los fotógrafos seleccionados son Esteve Ayats, Melitó Casals, Joan Moncanut, Francesc Simon, Adelí Torner y Robin Townsend Pi-Sunyer. También se incluyen fotos de Enrique Sabater, que fue secretario personal de Dalí hasta finales de la década de 1980, y de Joan Vehí, un carpintero de Cadaqués que convirtió la fotografía en su principal afición y tuvo el privilegio de captar a un Dalí "que no hacía comedia".

La exposición ha sido promovida por la asociación Amics dels Museus Dalí, una entidad que, con 850 socios, es la mayor asociación de amigos de un museo en España. Se trata de la primera de las exposiciones que Figueres dedica a Dalí con motivo del centenario de su nacimiento y que tendrán como escenario el Museo del Empordà.