4.000 abonados de Cadaqués y Roses se quedan sin luz en hora punta

Todo el municipio de Cadaqués y una parte del de Roses (Alt Empordà) se quedaron a oscuras poco después de las diez de la noche del pasado jueves a causa de una avería que afectó a unos 4.000 abonados de Fecsa-Endesa y se prolongó durante más de dos horas. Fuentes de la compañía atribuyeron la avería a la fuerte tramontana que soplaba en la zona y aseguraron que el servicio quedó totalmente restablecido a las doce de la noche. No obstante, fuentes consistoriales de la población costera aseguran que algunos abonados no vieron restablecido el servicio hasta las dos de la madrugada.

La avería se produjo a las 22.15 de la noche, cuando el viento dañó un aislador de una línea de media tensión que lleva energía al municipio, según informó ayer la compañía eléctrica. Las mismas fuentes aseguraron que los abonados se fueron reincorporando paulatinamente al servicio poco después de la avería, que no quedó totalmente resuelta hasta que un equipo de operarios sustituyó la pieza estropeada.

El consistorio de Cadaqués insistió ayer en la necesidad de mejorar la línea eléctrica que lleva energía al municipio y atribuyó la avería a una posible sobrecarga. El Ayuntamiento envió una queja al Departamento de Industria. El municipio turístico se encuentra estos días navideños repleto de visitantes. El apagón, que se produjo cuando los restaurantes y bares de la localidad estaban llenos de personas que se disponían a a cenar, causó indignación entre el vecindario. Los afectados recordaron también que la tramontana, una de las supuestas causas de la avería, no sopló el jueves con la fuerza de otros días.

Aunque en la villa de Cadaqués tan sólo hay censados unos 2.600 habitantes, se calcula que durante los días de Navidad la población supera ampliamente las 5.000 personas.