El error humano, origen de la fuga y de la parada en la refinería de Tarragona

Un fallo humano de un operario de Repsol fue la causa de la parada de la refinería de Tarragona, según fuentes cercanas a la investigación abierta por el Gobierno de la Generalitat. De igual forma, la fuga de acrilonitrilo ocurrida en la planta de Bayer obedeció a un error humano, ha explicado el concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Tarragona, Agustí Mallol.

El incidente de Repsol, que ocasionó la formación de grandes llamaradas procedentes de las chimeneas y columnas de humo, se produjo el pasado día 11 con un error en la conexión por parte de uno de los operarios, lo cual originó un cortocircuito que, a su vez, redundó en la parada de la planta. El incidente afectó asimismo a Dow Chemical y a Carburos Metálicos por la descompensación eléctrica.

Si Mallol disculpó esta situación por la presión con la que está trabajando el sector químico, "el primer interesado en velar por la seguridad", el alcalde de Tarragona, Joan Miquel Nadal, reclamó una mayor profesionalización y especialización de los trabajadores de las empresas radicadas en los polígonos del norte y sur de Tarragona. A las quejas del alcalde sobre la falta de competencia de los trabajadores, realizadas ayer, respondieron los sindicatos UGT y CC OO, que rechazaron de plano las acusaciones. El concejal de Medio Ambiente anunció la creación de una comisión de seguimiento de la seguridad en la industria química, integrada por las empresas, las autoridades municipales y autonómicas y por el sector turístico.

Por otra parte, el pasado martes, la comisión de Protección Civil de Cataluña otorgó su beneplácito a la revisión del plan de seguridad exterior del sector químico de Tarragona (Plaseqta), que incluye las últimas exigencias de las directivas europeas.