Cultura para encontrar trabajo

Manuel se echó ayer a llorar al recordar que se ha pasado 35 años sin coger un libro. "Sabía algo, pero casi se me había olvidado", explica, "¿quién me iba a decir que me iba a volver a acordar de cosas de matemáticas o de lenguaje?". Con 49 años y tras "cuatro o cinco" en paro, ahora espera enfrentarse al mercado laboral con menos inseguridad y más recursos. Manuel y otros 29 desempleados sevillanos mayores de 25 años, la mayoría vecinos del Polígono Sur, recibieron ayer el diploma que acredita su formación teórica y práctica durante 12 meses en los talleres de albañilería y pintura organizados entre el Inem y la delegación municipal de Empleo.

El programa combina la formación práctica con nociones teóricas para actualizar los conocimientos que casi todos tienen después de años de experiencia laboral en el sector de la construcción. Pero, como Manuel, la mayoría se muestra entusiasmado con las clases de cultura general, la llamada formación compensatoria, que aborda nociones de matemáticas, naturales, sociales y lenguaje.

"Es lo que necesitamos de verdad", asegura José Enrique Gordillo, otro de los alumnos. "A mi no me hacía falta aprender el oficio, pero sí cultura general, que la tenía olvidada. Sumar, restar, dividir con decimales", cuenta. Gordillo añade que ser vecino del Polígono Sur, la zona más desfavorecida de la ciudad, es un obstáculo añadido para encontrar empleo. Él vive en la barriada de Martínez Montañés y asegura que cuando va a pedir trabajo le miran raro. "Se enteran de que vives en las Tres Mil Viviendas y ya no te quieren", dice.

Aunque la mayoría ha trabajado antes como albañil o pintor, para algunos la parte práctica era nueva. Es el caso de Milagros Barra, de 36 años y con título de formación profesional en técnico especialista en administrativo. Llevaba meses parada y decidió apuntarse al taller de pintura. Ahora enumera con tecnicismos todo lo que ha aprendido. "Estuco, tratamiento de la escayola, técnicas alpinas de pintura...". Era una aventajada en las nociones de cultura general, pero no sabía nada del oficio al que está dispuesta a enfrentarse a partir de ahora.

El delegado municipal de Empleo, Antonio Rodrigo Torrijos (IU), les aseguró en el acto de clausura que más del 50% de los que han pasado por el taller tendrá trabajo. Ya hay empresarios interesados en contratarles, aseguró. Sin embargo, algunos alumnos se muestran escépticos y casi todos consideran que el taller tenía que haber durado más. A lo largo de este año, los participantes han cobran 658 euros al mes en 14 pagas. "Muy poco, pero algo. Ahora nos quedamos sin nada", apunta Eugenio Sánchez, de 38 años, casado y con tres hijos. "Confío en encontrar algo, pero por mí, no por el programa", asegura.

"Son muy agradecidos", se justifica ante tantos elogios José Antonio Rodríguez, el maestro que les ha refrescado desde las sumas con decimales a episodios importantes de la historia de España. "Vienen con muchas carencias, algunos casi sin saber leer o escribir, y salen sabiendo medir o entendiendo los test para sacarse el carné de conducir", explica.

Paradójicamente, el maestro que durante 10 años ha ayudado a buscar trabajo a muchos desempleados del Polígono Sur, se queda ahora en paro porque la formación de los talleres la asumirán a partir de enero los monitores de uno de los centros cívicos de la ciudad.