Bruselas critica la falta de competencia en las telecomunicaciones, que crecen el 4,7% este año

El último informe de la Comisión Europea sobre el sector de las telecomunicaciones certifica que se recuperará y crecerá entre un 3,7% y un 4,7% este año, moviendo 251.000 millones de euros. No obstante, la Comisión certifica que pese a la liberalización y las nuevas compañías sigue sin haber la suficiente competencia en telefonía fija, y los ex monopolios conservan el 70% del mercado. El crecimiento de la telefonía móvil sigue imparable. El 81% de los ciudadanos de la Unión Europea tiene un móvil y, por primera vez, se han superado los 300 millones de abonados.

La Comisión Europea en el IX Informe de Implementación, del pasado mes de noviembre, certifica una cierta recuperación del sector de telecomunicaciones (telefonía fija, móvil, Internet y televisión de pago) cuyo mercado en la Unión Europea crecerá entre el 3,7% y el 4,7% y alcanzará un valor de 251.000 millones de euros. El informe señala que, en consonancia con la mejora de la situación económica, el sector empieza a ver la luz y a salir de su frágil estado marcado por el alto nivel de deuda debido al escaso retorno de las inversiones realizadas en las redes y el alto coste de las licencias de telefonía móvil de tercera generación (UMTS).

En esa recuperación destaca en particular el crecimiento imparable de la telefonía móvil. El número de usuarios ha superado los 305 millones, y el 81% de los ciudadanos europeos tiene un móvil, con tasa de aumento del 8,1%, casi dos puntos más que en 2002.

El boom del móvil es tal que, por primera vez en un Estado miembro de la UE (Luxemburgo), el número de abonados a la telefonía móvil ha superado al de ciudadanos (115 teléfonos por cada 100 habitantes), es decir, que muchos de ellos tienen dos suscripciones. La asignatura pendiente sigue siendo la nueva telefonía multimedia, que permite navegar por Internet y el envío de imágenes, que apenas alcanzará el millón de usuarios a final de año.

También se produce un significativo aumento del número de conexiones a Internet mediante líneas de banda ancha que supera ya los 18 millones en toda Europa, aunque sólo representan el 4,7% del total de líneas.

Sin embargo, el informe llama la atención de que pese a la liberalización, la competencia en telefonía fija todavía es escasa y los antiguos monopolios (denominados también "incumbentes") conservan el 70% del mercado. Así, pese a que en toda Europa existen más 1.200 operadores legalmente autorizados para prestar servicios de voz (y otros 1.484 con redes) menos de la mitad (alrededor de 500) están realmente operativos comercialmente, y la mayoría sólo en áreas muy locales o para usuarios empresariales. Según el informe, "el número real de competidores en cada país es considerablemente menor tanto a los operadores activos (...). Generalmente en la gran mayoría de los países miembros no supera más de tres o cuatro grandes compañías", dice el informe.

La Comisión refleja que mientras que en los primeros años de la liberalización (1999-2000), los ex monopolios (France Télécom, Deutsche Telekom, BT, KPN, Telecom Italia) perdieron hasta el 15% de su cuota de mercado, en los siguientes años sólo pierden un 2,5% al año desde finales de 2000, y conservan aún el 70% del total. En España, Telefónica mantiene alrededor del 80%.

No obstante, poco a poco, las nuevas compañías van ganando terreno gracias a mecanismos como la preselección de llamadas,que permiten a un abonado dirigir todas las llamadas a través del operador elegido sin necesidad de cambiar la línea. El 33% de los abonados ya utilizan este mecanismo para sus llamadas de larga distancia (internacionales e interprovinciales), y el 25% para las locales. Pero sólo el 6% de los usuarios realiza sus llamadas por un operador alternativo con acceso directo. En España el 21,6% de los abonados utilizan una compañía alternativa para realizar sus llamadas.

El informe también pone mucho énfasis en que, fruto de la competencia, las tarifas de telefonía fija siguen bajando, pero en 2003 lo hicieron a un ritmo "significativamente menor que en 2002 y menos de la mitad que lo hicieron en 2001", tanto para llamadas nacionales como internacionales.

Así, entre 2002 y 2003, la factura media mensual para llamadas nacionales residenciales cayó un 0,3%, frente al 13,5% que disminuyó en los cincos años posteriores a la apertura del mercado de voz. Para los usuarios empresariales, el descenso de su factura es ahora del 0,5%, frente al 22% que disminuyó en los cinco ejercicios anteriores. Uno de los obstáculos con que se encuentran la nuevas compañías son los altos precios de interconexión que deben pagar a los ex monopolios por utilizar su red.