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LOS PARTIDOS, EN BUSCA DE LA MAYORÍA

Esquerra Republicana reclama a Convergència que evite la petulancia en la negociación

ERC sólo ha cerrado para hoy la reunión con el PSC para formar Gobierno

Francesc Valls

Los contactos para formar mayoría de gobierno en Cataluña comienzan con más interrogantes de los previstos. Incluso de procedimiento: no hay hora para la reunión negociadora entre Esquerra Republicana (ERC) y Convergència i Unió (CiU), prevista y publicitada pata hoy. Fuentes de ERC calificaron de "displicente" la actitud de CiU, cuyos negociadores se han ido de vacaciones sin fijar hora para el contacto de hoy. Es muy probable, por tanto, que la primera reunión para formar nueva mayoría sea la que mantengan esta tarde, a las 16.00 horas, en el Parlament los republicanos de Josep Lluís Carod con los socialistas de Pasqual Maragall.

Las vacaciones de Artur Mas y Josep Antoni Duran Lleida, negociadores de Convergència i Unió, han sido las causantes directas de que en la tarde de ayer aún no se hubiera fijado hora para un primer contacto con Esquerra Republicana. "Que no crean que nos van a tratar con la displicencia a la que están acostumbrados", subrayaron fuentes de la dirección republicana. "Nos dijeron [los de CiU] que ya nos llamarían mañana [por hoy] a primera hora, pero nosotros tenemos comisión permanente".

Por tanto, en la agenda de los republicanos para hoy sólo está concertada la reunión de las 16.00 horas con los socialistas en el Parlament.

Mientras las dos fuerzas mayoritarias se disputan el favor de Esquerra, el Partido Popular continúa su fuego racheado contra la participación de Esquerra en un futuro Gobierno de la Generalitat. El presidente del PP catalán, Josep Piqué, augura "escenarios muy inestables a corto y medio plazo" por los resultados electorales del pasado 16 de noviembre, por lo que no descartó que en 2004 se decida adelantar las elecciones autonómicas. Lo peor de estos escenarios, a juicio del ex ministro de Ciencia y Tecnología, es la participación de Esquerra en el Gobierno: ya sea el tripartito de izquierdas o el frente nacionalista con CiU, según una entrevista publicada por La Razón.

Los principios y el PP

A las argumentaciones de Piqué en clave catalana se sumaron las que anteayer hizo el secretario general del PP, Mariano Rajoy. El dirigente popular acusó a su homólogo del PSOE de olvidar sus principios generales por avalar el proyecto de izquierda plural propugnado por Maragall. "El PSOE está dispuesto a renunciar a sus principios con tal de hacer presidente a Maragall", subrayó.

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El vicepresidente segundo del Gobierno Javier Arenas siguió ayer la estela de Rajoy y advirtió al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, de que si quiere mantener a su formación "como partido nacional no puede dejarse condicionar en sus decisiones por un partido independentista y republicano" como ERC. Arenas hizo esta advertencia en un acto conmemorativo del 25º aniversario de la Constitución celebrado en la localidad sevillana de Carmona, donde hace 20 años también se fraguó el Estatuto de Autonomía de Andalucía.

El vicepresidente segundo del Gobierno advirtió a los socialistas de que "no se puede aspirar a ser gobierno en España y simultáneamente alcanzar acuerdos con formaciones políticas que defienden la independencia o que enterremos la Constitución", en alusión al posible pacto entre el PSC, ERC e Iniciativa (ICV-EUiA). Tras señalar que el PP va a seguir defendiendo en Cataluña la "estabilidad con la Constitución y el Estatuto", Arenas indicó que tanto CiU como el PSC han cometido "un grave error" que ha consistido en "radicalizar" la vida política catalana, de forma que al final los ciudadanos "no han querido copias y se han ido al partido independentista y republicano". Desde Esquerra, el número tres de la lista, Pere Esteve, indicó ayer que el PP no puede "dar lecciones" sobre el resultado de las elecciones catalanas, ya que pese a que ha subido, "en los comicios se ha quedado en una cierta situación de marginalidad". "Entre los defectos, que son muchos", de los populares uno de ellos, según Esteve, consiste en que "cuando las elecciones no van a su gusto, en general intentan enmendar, advertir... es una costumbre que han practicado en algunas otras elecciones, y me disgusta mucho que lo hagan".

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