Carod desafía a Artur Mas a que diga con claridad que quiere una Cataluña independiente

Los republicanos se lanzaron ayer abiertamente a la disputa del voto soberanista, al que también se dirigen en ocasiones los discursos de Convergència i Unió (CiU). Ésta es una batalla en la que el candidato de ERC, Josep Lluís Carod, se siente muy cómodo. Ayer retó al candidato de CiU a defender los mismos objetivos que ERC. Tras reafirmar que ERC quiere una Cataluña "libre, solidaria e independiente", Carod desafió así al delfín de Jordi Pujol: "Artur Mas i Gavarró, a ver si sabes repetirlo. A ver si tienes el coraje patriótico y la dignidad política para decir exactamente lo mismo. Hala, a ver si dices que quieres una Cataluña independiente".

Carod lanzó su desafio a Mas ante los 700 asistentes a un almuerzo mitin celebrado en el pabellón ferial de Vilafranca del Penedès. Es el mismo local en el que hace siete años se celebró el congreso de ERC que le eligió secretario general y cerró la etapa de Àngel Colom. Una gran bandera independentista presidía la amplia nave.

Carod reafirmó que, contra lo dicho la semana pasada por Mas, ERC sigue siendo un partido independentista. Se remontó para ello al congreso celebrado en aquel mismo local. Recordó que ahora ERC es el tercer partido de Cataluña, pero en 1996 "era un partido en crisis, con un futuro más bien negro". Este avance ha sido posible, agregó, porque ERC ha dejado de ser "el partido de una sola palabra, independencia, para ser el partido con un discurso completo". Y el discurso de ERC es, agregó, que "los países normales son independientes, y nosotros no renunciamos a que Cataluña lo sea".

Aunque las apelaciones de Carod, que cada día que pasa sube un grado la contundencia de sus intevenciones, se dirigen preferentemente al electorado nacionalista, sus dardos no olvidan al candidato socialista, Pasqual Maragall. Siempre procurando mantener el equilibrio. Con la audiencia ya muy animada por el reto a Mas, Carod reiteró después que "Mas y Maragall son más de lo mismo". Porque, como había dicho ya el viernes en Sabadell, "el cambio que necesita el país no es sólo de personas, ni de generación ni de partido gobernante, sino de clase social". Hasta ahora en ningún otro acto de esta campaña Carod había sido acogido y despedido como lo fue ayer con gritos de "¡Carod presidente, Cataluña independiente!".

La jornada de ayer comenzó para Carod en el barrio de Gràcia de Barcelona. En la sede del Orfeó Gracienc expuso la parte de su programa dedicada a la conciliación de la vida familiar y laboral. Tras la presentación, Carod, junto a su esposa, Teresa Comas -que le acompaña a menudo en la campaña-, hizo un recorrido por el barrio y visitó una vivienda en la que había realizado reuniones políticas en sus años jóvenes, cuando militaba en un partido comunista e independentista, el PSAN.