Euskadi supera por vez primera las 900.000 personas ocupadas

El País Vasco alcanzó durante el tercer trimestre de este año una cifra de personas ocupadas de 905.000, batiendo así su marca histórica al sumar 9.800 personas más que en el segundo trimestre. Este record de ocupación es uno de los datos más llamativos de la Encuesta de Población en Relación con la Actividad (PRA), que elabora el Instituto Vasco de Estadística-Eustat. Con este aumento, la tasa de ocupación se sitúa en el 64% de las personas entre 16 y 64 años que quiere trabajar y que busca empleo de una forma activa, muy cerca ya de la media de la UE.

El contrapunto a este hito histórico hay que buscarlo en el hecho de que el número de población en Euskadi se estanca o decrece, con lo que es más factible mejorar porcentualmente los niveles de ocupación.

Una de las consecuencias más favorables de la subida de la población ocupada durante julio, agosto y septiembre es que se mantiene, aunque atenuado, el descenso del paro en la comunidad autónoma. El número de desempleados descendió en 2.800 personas (un 0,3%), lo que deja la tasa de paro en el tercer trimestre de este año en el 8,1%, en torno a 79.800 personas.

La disminución del desempleo se deja notar, sobre todo, en Vizcaya y en Álava. En la primera la tasa queda en el 8,3%, después de que haya 3.700 personas menos en el desempleo que hace tres meses. El territorio alavés pierde 300 parados, dejando su índice en un 7,4%. Por su parte, Guipúzcoa presenta un balance negativo, al experimentar un repunte del paro con 1.300 desempleados, que dejan la tasa en el 8,1%.

La fotografía que ofrece el mercado laboral vasco es el de una homogeneización entre las comarcas, ya que las que sufrenmás paro y un mayor declive económico, casos de Bilbao y la Margen Izquierda, son las que más se recuperan, en contraste con las mejor situadas, que tienden a estancarse.

La situación laboral de la mujer se ha visto claramente beneficiada del aumento de la ocupación. Cuatro de cada cinco personas que han abandonado el desempleo durante el tercer trimestre son mujeres, aunque su tasa de desempleo sigue doblando a la de los hombres.

A la hora de buscar trabajo, el 60% de los parados vascos no aceptaría una oferta de empleo que le obligara a cambiar de residencia, según el sondeo realizado en el último Censo del Mercado de Trabajo (CMT) elaborado por el Departamento de Empleo y correspondiente al año 2002. Al menos un 82% de los encuestados estaría dispuesto a buscar el trabajo en la provincia en la que reside, sin que ello suponga dejar de vivir donde habitualmente lo hace. Otra dato significativo es que el 88% de los parados presenta algún tipo de dificultad para conseguir un trabajo, siendo la más citada la falta de cualificación (un 63% de los casos).

Precariedad

Aunque la ocupación ha subido y el paro ha descendido en relación al segundo trimestre, la precariedad del empleo no deja de crecer, siendo uno de los aspectos más negativos del panorama laboral. La Encuesta de Población en Relación con la Actividad (PRA) omite en su informe esta circunstancia, pero durante el primer semestre de 2003 la contratación indefinida rebasó el 8%.

El empuje del sector de servicios es el que más está contribuyendo a mejorar los niveles de ocupación y empleo. De hecho concentra, con 5.600 nuevos empleados, más de la mitad de los puestos creados en el tercer trimestre. Le sigue la construcción, con 4.100 personas más, mientras que la industria aumenta en otros 1.400. Este dato resulta significativo por suponer el primer incremento en la ocupación de este sector tras un año de acusado retroceso. La agricultura, en cambio, perdió 400 ocupados.

Mientras ELA, sindicato mayoritario en Euskadi, no dio su opinión sobre los resultados de la PRA porque no refleja la precariedad, Comisiones Obreras cuestionó la fiabilidad de los datos que apuntan a un descenso de 2.800 parados en el tercer trimestre del año. Según CC OO, la bajada "contradice" las cifras registradas por el Inem, que reflejan un aumento de 2.915 parados en el mismo periodo. La central considera que "los sucesivos retoques en la forma de contar el alcance del paro está haciendo perder credibilidad a las diferentes estadísticas".