160.000 alumnos de ESO recibirán formación específica para combatir el consumo de drogas

La prevención del consumo de drogas llegará este curso a 160.000 alumnos de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO) gracias a la aplicación del programa Prevenir para vivir, diseñado por la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción y adaptado a las peculiaridades andaluzas por la Junta. La iniciativa, que se presentó ayer en Sevilla en un acto presidido por la Reina, se extenderá a la totalidad de alumnos de la ESO en el curso 2006-07. Doña Sofía defendió la inclusión de la prevención en el sistema educativo como "la mejor vía para evitar la aparición de otros problemas que pudieran asociarse al consumo de drogas, como la violencia en la escuela y el desarraigo afectivo".

El programa de la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción (FAD) se aplica ya en Cantabria, Castilla-La Mancha, Extremadura, Madrid, Comunidad Valenciana y Melilla, pero Andalucía es la primera comunidad donde se adaptan los materiales a su propia realidad. Después de una fase de prueba entre febrero y junio pasados en la que han participado un centenar de profesores y 2.500 escolares, este curso comenzará a desarrollarse con 160.000 alumnos de la ESO (de entre 12 y 16 años) hasta cubrir la totalidad dentro de cuatro años.

El calendario diseñado por la Junta de Andalucía establece una cobertura del 40% este año, que permitirá la aplicación del programa en 700 centros escolares. Unos 20.000 profesores podrán participar en cursos de formación para desarrollar luego en las aulas el material preventivo del consumo de drogas mediante la promoción de las capacidades afectivas, intelectuales y sociales.

La presentación del programa Prevenir para vivir contó con la presencia de la Reina, que es presidenta de honor de la fundación. Doña Sofía subrayó que incluir la prevención en el sistema educativo es "la mejor vía para evitar la aparición de otros problemas que pudieran asociarse al consumo de drogas", entre los que citó la violencia en la escuela y el desarraigo afectivo en la juventud. En su intervención, expresó su satisfacción por la puesta en marcha del programa que persigue como fin último proteger la salud de los jóvenes y planteó que la educación no puede ser "sólo una estrategia de generación y conocimientos". "Educar implica también fomentar y estimular en los jóvenes el proceso de ser personas más seguras y más libres", agregó.

Reconocer la realidad

La importancia de las campañas de sensibilización e información fue destacada ayer por el presidente andaluz, Manuel Chaves, al señalar que el primer contacto con algunas drogas se produce a edades cada vez más tempranas y situar entre los 12 y los 16 años el grupo de edad en el que "es más necesario y urgente actuar". Como dato "estimulante" destacó que el consumo está descendiendo entre los jóvenes respecto al año 2000, según los datos del último estudio Los andaluces ante las drogas, y que la posibilidad de que los jóvenes tomen drogas ilegales disminuye 2,5 veces cuando en los centros se reciben e imparten pautas de comportamiento y prevención. "Como se ha demostrado tantas veces y como aconsejan los expertos, la prevención es una estrategia a seguir en materia de drogas", agregó.

En su discurso, Chaves indicó que las drogas están presentes en la sociedad. "Reconocer esta realidad, aunque no nos guste, es lo primero que debemos hacer para iniciar una reacción", precisó. En la misma línea se pronunció el presidente de la FAD, José Ángel Sánchez Asiaín: "No resulta ni realista ni conveniente satanizar esos consumos". El responsable de la fundación indicó que sería "suicida" ignorar el consumo y abogó por una educación integral en la que se impliquen padres, profesores, medios de comunicación y administraciones públicas. "Sólo se educa si se hace desde el principio de la vida y si se hace con distintas perspectivas", explicó.