La construcción eleva el consumo de áridos a 13,6 toneladas por habitante en 2002
Las canteras valencianas producen el 14,3% del total del consumo nacional de áridos
Una de cal y dos de arena. El crecimiento del sector de la construcción en todas sus vertientes, inmobiliaria y de obra civil, tiene un correlato directo en el aumento sostenido de la extracción de áridos en las canteras valencianas desde 1993. De los 396 millones de toneladas de areniscas destinadas a la construcción en España, la Comunidad Valenciana consume 57 millones (un 14,3% del total nacional), lo que eleva la ratio hasta 13,6 toneladas por habitante.
Los datos de las Asociación Nacional Española de Fabricantes de Áridos (ANEFA) discriminan las gravas y areniscas para la construcción de los caolines o sílices destinados a las aplicaciones industriales, como la producción de azulejos, y se centran en los volúmenes de áridos destinados a la construcción. El consumo de áridos para la construcción se elevó en toda España a 396 millones de toneladas en 2002, un 5,1% más que el año anterior que representa 9,7 toneladas por habitante.
El consumo total, incluidos las arcillas destinadas a la industria del azulejo, acumula otros 55 millones de toneladas y eleva la cifra a 451 millones de toneladas. Pero ANEFA no desglosa territorialmente el consumo de áridos para aplicaciones industriales.
Andalucía es el mayor productor de áridos para la construcción en números absolutos. El consumo alcanzó los 72 millones de toneladas en 2002, el 18,2% del total estatal, un porcentaje equivalente a la superficie de Andalucía sobre el total de España. De acuerdo con tales datos, las canteras andaluzas extrajeron 9,8 toneladas por habitante.
La asociación nacional registra 20 canteras en la provincia de Alicante, otras 20 en Valencia y apenas dos en Castellón. La Comunidad Valenciana ocupa el segundo lugar de España por consumo en números absolutos, con casi 57 millones de toneladas, un volumen que arroja un crecimiento porcentual respecto a 2001 del 8,5%, y un total de 13,6 toneladas por habitante.
Sólo Navarra acumuló en 2002 un consumo de áridos por habitante superior al registrado en la Comunidad Valenciana. Los datos de ANEFA atribuyen un consumo de 14,6 toneladas por cada navarro. Pero la producción total de áridos para la construcción en las canteras navarras asciende en números absolutos a 8,1 millones de toneladas, apenas un 2% del total español.
Los datos oficiales de ANEFA ponen de relieve un aumento sostenido de la extracción de áridos en España desde 1993. El volumen de consumo se ha duplicado en una década. Pero las expectativas para 2003 siguen siendo positivas. Según las previsiones de la asociación, la actividad constructora crecerá entre el 3,5 y el 4,5% en toda España.
Las estimaciones apuntan que la edificación residencial crecerá hasta un 2%; la no residencial entre el 2 y el 4%; la rehabilitación y el mantenimiento entre el 4 y el 5%; y la obra civil entre el 7 y el 9%.
El alcalde de Alcàsser, por ejemplo, se preguntaba el sábado de dónde se iban a extraer los millones de metros cúbicos de áridos necesarios para la plataforma del tren de alta velocidad. Con los problemas ambientales que representa. La extracción de arcillas para la producción de azulejos, por ejemplo, ha sembrado la alarma en la comarca de Los Serranos que asiste a cambios notables en el paisaje.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.