El servicio de autobuses de Barcelona es "muy malo", según un estudio
El servicio de autobuses de Barcelona, operado por Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), obtuvo una calificación media de "muy mal" en un estudio realizado por la revista Consumer en 13 ciudades de España. Esta posición la ocupa junto con A Coruña y Logroño, mientras que Madrid fue la única ciudad que aprobó con un "muy bien".
Los técnicos de la revista han analizado in situ el servicio que presta el autobús urbano en Madrid, Barcelona, Valencia, Bilbao, Málaga, Zaragoza, San Sebastián, Cádiz, A Coruña, Vitoria, Pamplona, Murcia y Logroño. La prueba se realizó los días 5, 8 y 9 de septiembre, en dos franjas horarias: de 10.00 a 14.00 y de 16.00 a 20.00 horas. En estos días se estudió la calidad de las marquesinas en las paradas, los carteles indicadores, la calidad del trayecto, la conducción y la accesibilidad del autobús para personas discapacitadas.
Sólo antes de subir al autobús, el servicio prestado por TMB fue considerado "aceptable", pues las marquesinas se encuentran limpias y conservadas, pero la información sobre la ruta de las líneas y su frecuencia es "regular", así como la puntualidad de los autobuses.
A partir de aquí, el servicio cae en picado. La calidad del trayecto fue evaluada como "muy mal", ya que uno de cada tres conductores no se acerca de forma adecuada a la acera y en uno de cada cinco casos el autobús inició su marcha antes de que los usuarios terminaran de acomodarse. Los conductores de los autobuses de Barcelona obtuvieron la peor calificación, junto con los de Zaragoza, A Coruña, Murcia, Logroño y Bilbao, por sus maniobras "demasiado bruscas", con "frenazos y acelerones excesivos", según el informe. Además, el 40% de los conductores de TMB incumplen las normas de tráfico. Sólo fue considerado "excelente" el respeto al límite de velocidad (50 km/hora). En cuanto a la adaptación del coche para discapacitados visuales y auditivos, el servicio es nulo en la capital catalana.
