Cultura propone la reposición del Giraldillo original tras su restauración
La Junta ha invertido 600.000 euros en la veleta de la Catedral
La Consejería de Cultura propondrá al Cabildo de la Catedral de Sevilla la reposición del Giraldillo original que corona la Giralda, tras cuatro años de restauración y una inversión de 600.000 euros, anunció ayer su titular, Carmen Calvo. "No creo que el Arzobispado y el Cabildo tengan nada que objetar", afirmó Calvo porque según los técnicos la estatua de 1568 está en condiciones de volver a su sitio.
En la presentación de la exposición sobre el proceso de restauración del Coloso de la fe victoriosa, conocido como el Giraldillo, la consejera de Cultura Carmen Calvo afirmó ayer que confía en que los titulares de la escultura, obra de Bartolomé Morel y "verdadero símbolo de la ciudad", acepten esa opinión.
Calvo, a quien acompañaron los directores de Bienes Culturales, Julián Martínez, y del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), Román Fernández-Baca, cree que no habrá "ningún problema" para la recolocación de la estatua en su lugar original.
Indicó que la "preocupación" del Arzobispado y del Cabildo "es la misma" que la de la Junta, y es "la restauración, la conservación y la seguridad de la pieza, y el fin que cumple coronando la Giralda". Calvo explicó que devolverán el Giraldillo tras la muestra, que tendrá lugar del 22 de octubre al 21 de diciembre en las Reales Atarazanas, para que los ciudadanos puedan ver "a la altura de su mirada un bien tan significativo del patrimonio andaluz".
La consejera ofreció ayuda técnica para la recolocación, pero precisó que tras el esfuerzo económico que han hecho en su restauración, el montaje deberá costearlo la Iglesia.
Además, recordó la obligación que establece la ley de que, salvo excepciones, los Bienes de Interés Cultural permanezcan en su lugar de origen. Insistió en que, tras la restauración, el Giraldillo está "en condiciones de seguir cumpliendo su función" de veleta de la Giralda y agregó que no sabe qué se hará con la réplica que se hizo en 1998 por su grave deterioro y el problema de seguridad que suponía. A la escultura, de 2.000 kilos, se le ha cambiado la estructura interna de hierro.
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