Recuperar un vehículo retirado por la grúa en Barcelona costará 130 euros, el 25% más

Recuperar un vehículo retirado por la grúa municipal en Barcelona costará 130 euros a partir de 2004. El Ayuntamiento ha incrementado la tasa 27 euros (el 25,5%) en las ordenanzas fiscales aprobadas ayer. La espectacular subida de la grúa responde a la decisión del consistorio de frenar el incivismo de los conductores y cobrarles el coste real de la retirada de un vehículo, según subrayó el concejal de Presidencia y Hacienda, José Cuervo. Las consecuencias de esta impopular medida preocupan al equipo de gobierno municipal debido a la proximidad de las elecciones autonómicas.

La indisciplina viaria va en aumento y los vehículos mal estacionados o que exceden del horario de las zonas azules cada vez son más. La grúa retiró el año pasado 140.000 vehículos, 11.000 de los cuales estaban abandonados en la calle. "Lo que ha ocurrido hasta ahora es que el infractor no pagaba el coste real de la retirada del coche. Es decir, que el Ayuntamiento -todos los residentes de Barcelona- subvencionaba el resto, lo cual llevaba al absurdo de que todos los ciudadanos pagaban parte del coste de la grúa de un conductor incívico", insistía Cuervo.

El nuevo precio fue objeto de un intenso debate en la comisión de gobierno. Ante la propuesta del concejal de Hacienda de incrementarlo el 25,5%, los socios de ERC e ICV -y también algunos del PSC- propusieron hacer una escala de precios, lo que acabó en consultas técnicas y jurídicas.

La de la grúa no fue la única tasa discutida. El incremento del 20% proyectado por los responsables para las terrazas de bares y restaurantes y vados de establecimientos -utilización del dominio público de la ciudad- se quedó en el 10% por las reticencias de ERC a gravar excesivamente a los comerciantes y al gremio de restauración. "Cuarenta metros cuadrados de terraza en el paseo de Gràcia cuestan 6.000 euros al mes y creíamos que se debía incrementar más", señalaron fuentes municipales.

Recargo del IBI

El impuesto que grava los bienes inmuebles (IBI) subirá como máximo el 3%, tope que ha decidido el consistorio después de la revisión del catastro. El de circulación no registrará ninguna subida y la plusvalía se incrementará el 0,89%. Las tasas suben más, el 5,5% de media. La novedad que se ha introducido en el IBI es que se incrementará el 50% el de los pisos que estén vacíos cuando el Gobierno apruebe el reglamento que determine cuándo un piso se considera desocupado. "La Ley de Haciendas Locales permite a los ayuntamientos gravar más a los propietarios que tienen pisos cerrados; pero si no se desarrolla el reglamento, no sirve para nada", manifestó la concejal de Hacienda, Montserrat Ballarín.