El consejero de Gobernación presenta su plan de emergencias ante accidentes contaminantes

El consejero de Gobernación de la Junta de Andalucía, Alfonso Perales, presentó ayer en Cádiz el plan de emergencias ante accidentes que causen contaminación en el litoral de Andalucía. Este programa persigue delimitar sobre qué administración recae la responsabilidad de actuar en un caso de accidente marino o costero, paliar, "en la medida de lo posible", los daños causados por un desastre ecológico y proteger los 1.100 kilómetros de litoral andaluz que están expuestos a riesgos potenciales.

"Serán siempre respuestas paliativas, porque vienen a corregir lo que ya no tiene solución, pero contamos con un instrumento que intentará reducir el impacto negativo de la catástrofe actuando de manera inmediata", explicó ayer Perales.

Este plan, que contará con un presupuesto de 11,8 millones de euros los próximos cuatro años, pretende convetirse en "el instrumento que necesita" Andalucía para responder ante desastres ecológicos o vertidos contaminantes, como el ocurrido tras el hundimiento del Prestige en Galicia, según explicó Perales.

Este programa recoge la creación de diversos órganos que serán los responsables de responder "rápida, eficaz y adecuadamente" ante una emergencia en el litoral andaluz, como el grupo técnico de evaluación, de carácter permanente, que determinará a qué administración corresponde actuar.

Al mismo tiempo, la Junta crea un grupo de investigación que dependerá de la Consejería de Medio Ambiente. Este equipo analizará las causas de los accidentes y los métodos que deben emplearse. También habrá cuatro unidades de intervención inmediata que se desplazarán al lugar donde se produzca el accidente o la contaminación. Estos cuerpos de actuación rápida estarán formados por medio centenar de técnicos, capataces y especialistas, además de helicópteros, aviones, barcos y material para afrontar desastres ecológicos.

El plan, que está basado en ciertos aspectos en el modelo francés, comenzará a funcionar en 2004 con un comité científico "para que sean los técnicos y no los políticos los que adopten las decisiones", según explicó Alfonso Perales. Además, un órgano de participación canalizará la ayuda y la implicación del voluntariado.

El responsable político de dirigir el mecanismo de emergencia será el consejero de Gobernación de la Junta de Andalucía si afecta a buena parte del litoral andaluz y al delegado de Gobierno andaluz en aquella provincia que resulte afectada. Con todo, para Alfonso Perales, la gran virtud del plan es "que detalla inmediatamente a qué administración le corresponde actuar y en el caso de la Junta cómo y con qué medios".