El Ejecutivo se niega a apoyar el plan de choque de Sestao por "partidista"

El plan de choque para la regeneración de Sestao, anunciado el martes por la Diputación de Vizcaya, nace con polémica. El Departamento de Vivienda, dirigido por IU, aseguró ayer que no piensa apoyarlo, pese a que dispone de una partida de nueve millones de euros.

El viceconsejero Javier Dean lo calificó de "partidista" al no contar ni con el Gobierno, que ya había constituido hace un año un foro para la regeneración de Sestao, ni el grupo local de IU, que gobierna en coalición con el PNV y una plataforma vecinal. "Que se olvide de contar con nuestro respaldo", recalcó Dean.El viceconsejero de Vivienda se refirió a la segunda mesa de regeneración de Sestao, creada el pasado año después de que fracasase la primera, en la que se recogían actuaciones similares a las anunciadas por la Diputación: construcción de viviendas y desarrollo de un área industrial. "¿No es mucho más lógico y eficiente que si la Diputación quiere participar lo haga dentro de la sociedad que están creando Departamento y Ayuntamiento en lugar de crear otra entidad?"

Dean instó a la Diputación a exponer cuánto dinero aportará y añadió que "ataca el pacto de gobierno" en Sestao, "en el que se acordó constituir una sociedad entre el Ayuntamiento y el Ejecutivo vasco, que a futuro estará abierto a que entre la institución foral".

El PSE vizcaíno ha pedido la comparecencia en las Juntas Generales del diputado general, José Luis Bilbao, quien realizó el anuncio del plan, que para los socialistas es "secretista" y "electoralista". "Ni se ha contado con el PSE, segunda fuerza municipal, ni se ha comunicado nada a otros grupos municipales que forman parte del gobierno actual".

Los socialistas, que mantuvieron la alcaldía desde 1979 hasta los pasados comicios, solicitan explicaciones porque la sociedad de gestión del plan de choque "margine al Gobierno a pesar de que está prevista la construcción de 1.500 viviendas". Consideran "gratuitas" las justificaciones de Bilbao al anunciar el plan sólo tres meses después de que el PNV accediera a la alcaldía. "Contrasta con la actitud mantenida [por la Diputación dirigida por el PNV] de escasa colaboración con el gobierno municipal socialista".