Cinco directoras de la Mujer de autonomías del PSOE dan plantón hoy a Míriam Tey

Cinco directoras generales de organismos autonómicos de la Mujer han acordado no asistir hoy a la reunión convocada por la directora general del Instituto de la Mujer, Míriam Tey. De esta forma reprueban la permanencia en el cargo de quien consideran "desautorizada" por haber publicado en su editorial el libro de ficción Todas putas.

Las directoras generales de cuatro comunidades gobernadas por el PSOE (Andalucía, Asturias, Castilla-La Mancha y Extremadura) y de una en la que los socialistas forman parte de la coalición de gobierno (Cantabria) enviarán a personal técnico al encuentro fijado para abordar la aplicación de la orden de protección a las víctimas de la violencia doméstica, según manifestaron fuentes próximas a estas responsables. De esta forma pretenden "garantizar la colaboración institucional en todo lo que se precise", "pero sin renunciar a la repulsa que, desde el punto de vista ético y político, nos produce la situación que el Gobierno ha creado en la dirección del Instituto de la Mujer". Así lo señalan en un escrito dirigido al ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Eduardo Zaplana.

En ese texto califican como "inexplicable" que el Gobierno mantenga en su cargo a Tey tras conocerse que publicó en la editorial de la que es copropietaria un libro que "induce a la violencia hacia las mujeres y las niñas". Añaden que existe una "contradicción total" entre ese hecho y el cargo que ostenta, lo que "la desautoriza para el ejercicio de la máxima responsabilidad del Estado en políticas de igualdad, y más cuando se trata de combatir la violencia de género". Califican el mantenimiento de Tey como "una grave desconsideración hacia todas las mujeres españolas". La reunión era la primera convocada por la directora del Instituto de la Mujer con sus homólogas autonómicas desde que, en mayo, saltó la polémica de Todas putas. Entonces, siete directoras autonómicas (las de Asturias, Andalucía, Baleares, Canarias, Castilla-La Mancha, Extremadura y Cataluña) pidieron la dimisión de Tey, quien a partir de ese momento redujo al máximo sus comparecencias públicas.