Peralta augura que ni el textil ni el calzado sufrirán un descalabro laboral por la liberalización comercial

Miguel Peralta, consejero de Industria, desestimó ayer la alarma que agitaba esta semana el Centro de Información Textil y de la Confección (Cityc) en torno a las consecuencias de la liberalización de los intercambios comerciales sobre el empleo en el sector. Peralta sometió al Consell un informe sobre la coyuntura que atraviesa la industria valenciana que apunta al diseño, la calidad y la innovación en los sectores del textil o el calzado, que exigen mano de obra intensiva para garantizar la producción en ciertas temporadas, como armas eficaces para afrontar la competencia de los fabricantes asentados en el sureste asiático o los países candidatos al ingreso en la Unión Europea, donde los costes laborales son muy bajos.

El informe de Cityc, elaborado para el Ministerio de Ciencia y Tecnología y el Observatorio Industrial Textil, aseguraba que hasta un 43% de los trabajadores empleados en la actualidad en el sector textil en comarcas como L'Alcoià y la Vall d'Albaida corrían riesgo de perder sus puestos de trabajo.

Pero Peralta, que fue alcalde de Alcoi y aseguró conocer bien el paño, apuntó: "El textil está en crisis desde hace 20 años, pero la desaparición de empresas siempre se ha compensado con la aparición de otras nuevas". El responsable de Industria aseguró que las posibilidades que ofrecen productos como "el textil técnico" todavía no se han explotado, sugirió que no se producirá "ningún descalabro laboral" más allá de "problemas puntuales" y vaticinó "una transferencia entre sectores" de la mano de obra.

El responsable de Industria subrayó un reciente repunte de la demanda interior y se mostró optimista ante "la oportunidad" futura que constituye el actual "reto" de la ampliación europea: "Cuando las rentas de los nuevos países miembros de la Unión Europea se vayan equiparando a la media tendremos cien millones de clientes potenciales más".

El Consell también nombró a Vicente Garrido Mayol presidente del Consell Jurídic Consultiu (CJC). Garrido ocupaba el cargo de secretario del CJC y está vinculado a la institución consultiva desde su origen en 1996.