"En el GIL también había gente honesta y engañada"

El alcalde de Estepona, Antonio Barrientos (PSOE), tiene entre sus manos una patata caliente: decidir si exige responsabilidades a los gestores municipales en la etapa en que gobernó Jesús Gil Marín (1995-99) por el gasto de 24 millones de euros que según el Tribunal de Cuentas no están debidamente justificados. Entre aquellos concejales hay ahora tres inscritos en el Partido Estepona (PES) que son sus socios de gobierno. Barrientos insiste en que pedirá responsabilidades si las hubiere "caiga quien caiga", pero en la junta de dos sociedades municipales no lo ha hecho porque alega que "no tenían actividad". Insiste en que lo hará en las otras ocho y asegura que la destitución de los liquidadores de las sociedades municipales se debe a que no hacían bien su trabajo y a que ellos mismos lo pidieron, algo que éstos niegan.

"La imagen de circo y denigrante de Marbella perjudica a todo el sistema democrático"

"Un plan general no se desvirtúa porque se hagan más número de modificaciones"

Pregunta. Los ex liquidadores que usted ha depuesto insisten en que el motivo es que usted no quiere que se pidan responsabilidades a sus socios de gobierno.

Respuesta. Hay un acta levantada de una reunión celebrada en esta alcaldía en la que estaban los liquidadores, el oficial mayor y el secretario, que son los asesores legales de mayor rango del Ayuntamiento y fedatarios públicos, y en la que se ve que tenían la voluntad manifiesta de no continuar, incluso alegaron motivos de salud y yo les pedí que continuaran. Hay cosas muy raras, no entiendo por qué a los cuatro días de tomar posesión convocaron junta de las sociedades cuando durante seis meses no lo habían hecho, el informe provisional del Tribunal de Cuentas llegó en enero y la única diferencia es que había una alcaldesa del PP.

P. ¿A que atribuye que los liquidadores mantengan otra versión?

R. Me pregunto si es que existía algún pacto oculto entre los antiguos liquidadores y el PP. Cuando se les cesa van a las sociedades con una cámara de televisión y un concejal del PP, Guillermo Galeote, a denunciar que no se les dejaba entrar. Llevaban cinco semanas sin ir a la oficina y van al día siguiente de ser cesados.

P. Lo que parece claro a la vista del informe del Tribunal de Cuentas es que la gestión del equipo de Gil Marín causó un perjuicio económico al consistorio.

R. Eso lo tendrán que decir los jueces. Nosotros detectamos algunas presuntas irregularidades y lo que hacemos es ponerlo en conocimiento del poder judicial, que es quien debe determinar a lo que ha lugar. Nosotros actuamos con la máxima transparencia, máxima colaboración y siguiendo las recomendaciones del Tribunal de Cuentas.

P. ¿Siente que hay sobre usted un marcaje especial por gobernar con ex concejales del GIL?

R. Quien no tiene nada que ocultar no tiene nada que temer. Con el tiempo, las cosas se pondrán en su sitio. Yo me siento respaldado por mi partido, y es verdad que hay una presión de algunos medios claramente controlados por gente a la que no le interesa que gobernemos esta ciudad. Yo tengo la intuición de que he pactado con gente honesta, nunca hubiera pactado con golfos.

P. Eso no es lo que pensaba cuando en 1999 denunció las presuntas irregularidades en la Fiscalía Anticorrupción

R. No conocía realmente a las personas, con el paso del tiempo uno va conociendo. Aquí ha habido golfos y canallas que se han enriquecido, llegaron con un Panda de cuarta mano y ahora tienen patrimonios de miles de millones de pesetas. Yo respondo por mí, no soy defensor ni acusador de nadie; nosotros estamos dispuestos a que investiguen nuestro patrimonio. En el GIL también había gente honesta o gente engañada, pero le hemos puesto un estigma a todos y tampoco es justo.

P. ¿Qué diferencia hay entre que su partido gobierne con ex giles en Estepona o en Marbella, donde han sido expulsados del PSOE los concejales que firmaron la moción de censura?

R. No tiene nada que ver. Nosotros pactamos con un partido de nueva creación, donde es cierto que hay miembros que fueron del GIL, pero la mayoría son representativos de la sociedad esteponera, empresarios, profesionales liberales y gente decente y honesta. El cabeza del grupo se desligó del GIL en 1999 y los otros dos concejales, cuando la moción de censura que pusieron contra nosotros el GIL y el PP tuvieron un comportamiento de decencia democrática y no se adhirieron. No olvidemos que aquí al GIL lo absorbió el PP, un día se acostaron siendo del GIL y desayunaron siendo del PP. ¿Qué paso aquella noche? Pero los que hoy están en el PES se pasaron al grupo mixto y formaron un partido que ha tenido un respaldo popular con una candidatura con mucha gente representativa de la sociedad esteponera. Además, nosotros pactamos bajo las directrices y el consentimiento de la dirección del PSOE, no se hizo nada a las espaldas de ésta.

P. Hay convenios firmados durante su anterior etapa de alcalde que requerían modificaciones al PGOU que la Comisión Provincial de Urbanismo no autorizó ¿qué va a pasar con ellos?

R. Un plan no se desvirtúa por el número de modificaciones que se hagan, sino de los contenidos. Una sola modificación puede desvirtuar más que las 73 que ha habido aquí, pero es que de cambios de clasificación de suelo ha habido muy pocas. Teníamos además mucho suelo urbano transitorio que están consolidados ya y a los que había que dar una solución.

P. Estepona sigue teniendo mucho suelo virgen hacia el interior. ¿Cómo prevé su desarrollo?

R. Aplicar lo que se habla tanto y nadie practica: un desarrollo sostenible, con un crecimiento ordenado, armónico, equilibrado y racional. El otro día inauguramos un complejo construido en virtud de un convenio firmado en mi anterior mandato, se trata de una parcela de 90.000 metros cuadrados a la que correspondían 250 viviendas según el PGOU y en la que planteamos bajar la densidad. Hicieron 180 viviendas, y quedan 37.000 metros de zonas verdes y una serie de equipamientos. Los promotores están satisfechos y esta es la filosofía que le estamos transmitiendo porque la demanda quiere ahora viviendas de calidad, con zonas verdes y un entorno adecuado. Tenemos además la responsabilidad de construir viviendas de promoción pública, que es prioritario para nosotros, y este año vamos a liberar suelo para 250 de esas viviendas.

P. ¿Seguirá adelante con el proyecto de construir una marina y 3.000 viviendas junto a la desembocadura del río Guadalmansa?

R. Ahora mismo está en espera. En un futuro lo retomaremos y analizaremos si es beneficioso o no para la ciudad. Hay una edificabilidad alta y tenemos que compatibilizar el interés municipal con el proyecto de los promotores. Si ello es posible, tiraremos hacia delante y si no, daremos marcha atrás.

P. ¿Cómo ve la crisis originada por la moción de censura en Marbella?

R. Sólo puedo decir que yo jamás hubiera actuado de esa manera tan precipitada y que no se llega a entender. Sólo hace dos meses que se celebraron las elecciones y se le hace un flaco favor a la democracia, pero quien tiene que explicarlo es quien ha dado ese paso, yo no llego a entenderlo.

P. ¿Puede afectar los intereses de la Costa del Sol?

R. Indudablemente la imagen de espectáculo circense y denigrante que se está dando no nos favorece absolutamente en nada, ni a Marbella, ni a todo el entorno, pero tampoco al sistema democrático en general. Es un perjuicio para todos.