Microsoft debe pagar 520 millones de dólares por integrar en su navegador una tecnología ya patentada
El jurado de un tribunal de Chicago (Estados Unidos) ha condenado a Microsoft a pagar una multa de 520,6 millones de dólares (unos 460 millones de euros) por integrar en su navegador de Internet, Explorer, una tecnología que ya estaba patentada por la Universidad de California y la compañía Eolas. Microsoft ha anunciado que recurrirá la sentencia.
La Universidad de California y Eolas habían registrado, en octubre de 1994, la patente de una tecnología que, básicamente, mejora la interactividad de las páginas web porque permite crear aplicaciones de audio o vídeo.
Según los demandantes, a Microsoft se le ofreció en 1994 la posibilidad de licenciar este programa, pero el gigante de software lo instaló en su navegador Explorer sin pagar la patente. "[La tecnología] ha permitido a Microsoft ganar una cuota de mercado mayoritaria en el negocio de los navegadores y, por tanto, miles de millones en beneficios", dicen Eolas y la Universidad de California.
Ambas aseguran que su patente ayudó a Microsoft a ganar la guerra de los navegadores contra el que entonces era el líder del mercado, Netscape. En su demanda, reclamaban 1.200 millones de dólares a Microsoft (3,50 dólares por cada unidad de Explorer vendida entre noviembre de 1998 y septiembre de 2001). La multa se ha quedado, finalmente, en la mitad (1,47 dólares por unidad). Según datos de la agencia Bloomberg, se trata de la mayor compensación económica que se ha producido este año entre los juicios con jurado celebrados en Estados Unidos.
Microsoft asegura, por su parte, que la tecnología que incorpora Explorer está basada en anteriores desarrollos de sus ingenieros, y que es sustancialmente distinta a la patentada por Eolas y Universidad de California. "Aunque la decisión es desalentadora", aseguró la empresa informática ayer en un comunicado, "confiamos en que los hechos y la ley apoyarán nuestra posición".
Por otra parte, Bill Gates, fundador de Microsoft, vendió dos millones de acciones de Microsoft entre el 6 y el 8 de agosto pasados, después de que la Comisión Europea amenazara con sancionar a la compañía con una multa de hasta el 10% de sus ventas si no modifica sus prácticas contra la competencia. El gigante informático estadounidense tiene menos de un mes para responder a Bruselas y para tomar en consideración una serie de soluciones que se le proponen desde el Ejecutivo comunitario.
