El juez deja libre y no retira el carnet al conductor que arrolló a un 'mosso'

El conductor de Quart (Gironès) detenido el sábado acusado de atropellar mortalmente a un agente de los Mossos d'Esquadra en un control de alcoholemia quedó ayer en libertad con cargos por orden del titular del Juzgado de Instrucción número 7 de Girona, que no le ha retirado el permiso de conducir. Fuentes judiciales explicaron ayer que el conductor, Pedro T. P., marcó 0,67 en el control de alcoholemia que se le practicó tras atropellar al agente. En la mañana de ayer, tras comparecer ante el juez, recuperó la libertad a la espera de juicio. Asimismo, el juez de guardia acordó que el conductor mantuviera el permiso de conducir, pese a que tenía antecedentes por conducir bajo los efectos del alcohol, según informó la policía autonómica.

Los hechos sucedieron sobre las seis de la mañana del sábado, cuando el conductor atropelló a uno de los agentes de la policía autonómica que participaban en un control de alcoholemia instalado en la carretera N-II, a su paso por Fornells de la Selva (Gironès). El conductor, de 49 años y que fue detenido como presunto autor de un delito contra la seguridad del tráfico, atravesó por el medio la rotonda de la N-II tras la que los Mossos d'Esquadra habían montado el control de alcoholemia y se dirigió a toda velocidad hacia los agentes, que estaban colocados en un vial de servicio de la carretera.

El vehículo del conductor ebrio se estrelló contra uno de los coches patrulla de los Mossos d'Esquadra, salió rebotado, se llevó por delante al agente fallecido y acabó empotrado en la furgoneta de atestados de la policía autonómica. Los compañeros del agente atropellado lo trasladaron urgentemente al hospital Josep Trueta de Girona, donde ingresó en estado crítico y murió poco después, hacia las nueve de la mañana. El agente fallecido, que tenía 26 años y llevaba cuatro de servicio en los Mossos d'Esquadra, fue enterrado ayer en Girona tras un funeral oficiado en la parroquia de Santa Eugènia de esta ciudad.

Ocho muertos

El agente fallecido es una de las ocho personas muertas este fin de semana en Cataluña durante la operación salida de las vacaciones de agosto, en la que se han registrado retenciones que alcanzaron los 23 kilómetros en algunos puntos de la red viaria catalana. En la jornada de ayer fallecieron tres personas en sendos accidentes de tráficos. Una mujer de 58 años murió a primera hora de la mañana cuando el coche que conducía por la autopista A-2 se salió de la vía y chocó contra un árbol, a la altura de Castelldans (Garrigues). La mujer, María Jesús M. O., murió en el acto, mientras que su acompañante, Pedro M. D., resultó herido leve.

Por la tarde, dos personas perdieron ayer la vida y varias resultaron heridas, una de ellas de gravedad. El accidente más grave ocurrió en el kilómetro 121,5 de la carretera C-14, a la altura de Oliola (Noguera).