Maragall, con los emprendedores de Girona

Que la tradicional vinculación entre Convergència i Unió (CiU) y ciertos sectores empresariales dé paso a la apuesta por el "cambio" representada por el Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC). Ése fue el mensaje del candidato socialista a la presidencia de la Generalitat, Pasqual Maragall, ante un centenar de influyentes representantes del mundo económico de las comarcas de Girona el pasado lunes por la noche en una cena en S'Agaró (Baix Empordà). Maragall aseguró que el crecimiento económico de Cataluña necesita "un poco de estropicio", en alusión a una ruptura moderada respecto al gobierno nacionalista.

El mantenimiento de la situación actual "es más arriesgado" que el cambio, según el líder socialista. Maragall hizo referencia al peligro que significa la continuidad, reclamó el inicio de una etapa de mayor ambición y se comprometió a no traicionar la confianza que los empresarios depositen en sus propuestas. Además, alertó de que el cambio es hoy una necesidad "casi fisiológica" para el crecimiento y que la seguridad sólo vendrá si se comienza un nuevo periodo "con ambición, solvencia y estrategias de futuro".

El proyecto de impulsar una gran región económica integrada por Cataluña, Aragón, Baleares, Valencia, Montpellier y Toulouse fue otro de los puntos importantes del discurso de Maragall ante el empresariado gerundense. El candidato socialista explicó que ve a Cataluña como uno de los motores de esta gran estructura empresarial y que la comunidad autónoma debe recuperar "el liderazgo en España y ser puntera en Europa". Maragall agregó que de ninguna manera aceptará "un mapa ferroviario de España que sólo conecte Madrid con las otras 50 capitales de provincia", y dejó claro que rechazará un esquema centralista. "Pero soñar en la independencia no ayudaría mucho, nos distrae de lo que deberíamos hacer", agregó.

Los empresarios recibieron elogios del candidato socialista con respecto al dinamismo de las comarcas de Girona. Maragall deseó que toda Cataluña llegue a tener "el empeño y el vigor de Girona", y afirmó que las tres bases del futuro económico catalán son la agroindustria, el turismo y la sociedad de la información. El turismo es un sector primario en Girona, "un motor que arrastra el dinero", según el líder del PSC.

"El crecimiento económico y el equilibrio social es el futuro de la socialdemocracia", manifestó Maragall al final de la noche, además de buscar la complicidad de los empresarios cuando recalcó que el sector económico "es uno de los ejes más importantes de la sociedad".

Inmigrantes

La relación entre emigración y progreso económico también estuvo presente en su alocución. Maragall opinó que los empresarios deben contribuir a integrar a los nuevos emigrantes, para evitar así la "fractura social". El candidato socialista insistió en su idea de que un país no avanza si no se acepta la "mezcla de sangre, de ideas y de culturas diversas".

Entre el centenar de asistentes a la cena que se celebró en S'Agaró se encontraban representadas las principales asociaciones empresariales, cajas de ahorros y algunas de las más importantes empresas ubicadas en las comarcas de Girona. Acudieron a la cita integrantes de la Federación de Organizaciones Empresariales de Girona (FOEG) y de Pimec-Sefes, así como el presidente de Caixa de Girona, Arcadi Calzada, y el director general de la misma entidad, Aleix Gimbernat.

El polémico ex alcalde de Calonge, Josep Rosselló, que abandonó las siglas de Convergència i Unió (CiU) en las pasadas elecciones, también estuvo presente e incluso saludó al candidato socialista.