La huelga de sanidad obliga a anular el 15% de las operaciones previstas
El paro fue seguido por el 10% de los trabajadores, según la Comunidad
Menor actividad que en un día normal, pero no se paralizó el funcionamiento de los servicios sanitarios. Éste es balance de la primera jornada de huelga en la sanidad pública convocada en Madrid por sindicatos médicos, de enfermería y de funcionarios. La Comunidad afirma que el seguimiento rozó el 10% y que se suspendieron unas 130 operaciones (un 15%), unas 2.500 consultas hospitalarias (un 12%), uno de cada tres análisis de sangre y sólo un 3% de las pruebas de radiografía. Los sindicatos cifran el seguimiento del paro en un 70%.
El primero de los dos días de la huelga se saldó con normalidad y una fuerte disparidad en las cifras de seguimiento del paro ofrecidas por la Administración y los cuatro sindicatos convocantes. El Gobierno ofreció datos de la actividad suspendida hasta las 15.00. Según esas cifras, 35 de los 206 quirófanos operativos cerraron, lo que supone la cancelación de unas 120 intervenciones de las 800 programadas. Por la tarde, sólo cerraron dos de los 29 quirófanos previstos. El total de intervenciones canceladas durante el día fue de unas 130. Las consultas hospitalarias suspendidas fueron 2.100 de las 26.000 previstas, según el Imsalud, que no ofreció datos de atención primaria.
Los análisis de sangre fue la actividad más afectada por el paro. Un 33% de las 5.100 extracciones previstas por la mañana no pudieron realizarse. En pruebas diagnósticas (mamografías, ecografías....) el seguimiento fue menor, ya que la mayoría de los profesionales que las realizan son técnicos, no convocados al paro. Los porcentajes de cancelaciones por la tarde fueron similares, según el Imsalud, que afirmó que apenas siguieron la huelga un 5% de los médicos, un 17,5% de las enfermeras y un 7,9% de los auxiliares.Los cuatro sindicatos convocantes -el de médicos, CESM, el de enfermería, SATSE, el de auxiliares, SAE, y el de funcionarios, CSI-CSIF- reaccionaron airadamente a las cifras ofrecidas por la Consejería de Sanidad.
Los sindicatos acusan a Sanidad de seguir una "estrategia premeditada para ningunear la huelga", según SATSE. Los sindicatos afirman que esta estrategia tiene dos niveles: la imposición de unos servicios mínimos excesivos -no fueron pactados- y un "maquillaje espectacular de las cifras de seguimiento".
El sindicato CESM calificó la jornada de "éxito absoluto" y cifró el seguimiento en este colectivo en el 70%. SATSE, por su parte, dijo que el apoyo de las enfermeras fue similar en los grandes hospitales y algo menor en los medianos. Las cifras ofrecidas por SAE y CSI-CSIF coincidieron en lo esencial con las anteriores.
La disparidad de cifras ofrecidas por una y otra parte se explican en buena parte por los sistemas de cálculo utilizados. Sanidad ofrece el porcentaje de trabajadores que no acudieron a su lugar de trabajo, mientras los sindicatos sumaron a esta cifra la de todos los empleados que trabajaron por los servicios mínimos impuestos por Sanidad.
Los servicios mínimos, que se cumplieron a rajatabla, son del 100% en las diálisis programadas, la cirugía oncológica y toda aquella que requiera una preparación previa de días. También se están realizando todos los seguimientos de los tratamientos contra el cáncer, los trasplantes de órganos y servicios de urgencias, con las pruebas diagnósticas necesarias incluidas.
Los trabajadores convocados al paro ayer y hoy son más de 50.000. Los sindicatos reclaman la implantación inmediata de la jornada de 35 horas semanales, de un nuevo sistema de carrera profesional y retributivo y la contratación de más plantilla en los centros. Además de estas demandas conjuntas, cada sindicato exige otras para el colectivo al que representan. Los sindicatos, además, argumentan que han llegado a la huelga ante "el caos y mala gestión llevada a cabo por Sanidad" en el último año, según los responsables de CESM y SATSE, Carlos Amaya y José María Porras, respectivamente.
El Imsalud, por su parte, asegura que gran parte de las demandas de los sindicatos (como la homologación salarial o las 35 horas semanales) ya están en marcha, aprobadas o en negociación según el Plan de Calidad, un acuerdo suscrito hace un año entre el Gobierno regional y los sindicatos convocantes. Éstos afirman que Sanidad no ha llevado a la práctica casi ninguno de los puntos acordados en el Plan de Calidad, algo que niega el Gobierno regional, que afirma que ha aumentado el sueldo de las plantillas y ha contratado a 2.000 profesionales.
Los sindicatos CC OO y UGT, que no firmaron el Plan de Calidad ni secundan la huelga, critican a las dos partes en conflicto.
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