La piratería mundial recaudó 4.000 millones de euros en 2002

La piratería mundial consiguió en 2002 unas ventas de 4.600 millones de dólares (4.041 millones de euros) en todo el mundo, según las cifras publicadas ayer por la IFPI, un organismo que agrupa a 1.500 compañías de discos de 70 países. España está entre los 10 mayores mercados mundiales ilegales, una lista encabezada por Brasil y China. Las ventas de discos ilegales, que suponen ya un cuarto del mercado español, generaron un valor de mercado de 58 millones de euros.

Jay Berman, presidente y primer ejecutivo de la IFPI, que en España actúa a través de la Asociación Fonográfica y Videográfica Española (AFYVE), denuncia en su introducción del informe anual que dos de cada cinco grabaciones que llegan al mercado son copias piratas. "Las víctimas son cientos de miles de personas empleadas de manera directa o indirecta por la industria de la música, y los gobiernos que pierden millones en ingresos fiscales cada año", advierte Berman.

El informe de la IFPI revela que las ventas piratas crecieron un 7% en 2002 en todo el mundo hasta superar los 4.000 millones de euros. Ése es el valor estimado en precios del mercado pirata, por lo que las pérdidas generadas en ventas no consumadas por la industria legal son muy superiores.

Las ventas piratas de discos se han doblado desde los 510 millones de discos compactos en 1999 a 1.100 millones de unidades el año pasado. Incluyendo las casetes, las unidades piratas vendidas en 2002 alcanzaron los 1.800 millones. Frente a estas cifras, las autoridades mundiales se incautaron 50 millones de discos compactos ilegales, cuatro veces más que en 2001.

En Europa la piratería está especialmente extendida en Grecia (donde más de la mitad del mercado es ilegal). En Chipre, Italia, Portugal y España supera el 25% del mercado total, y en Bélgica, Finlandia y Holanda está por encima del 10%.

En España, las ventas piratas sólo crecieron el 0,2% el año pasado, pero suponen ya uno de cada cuatro discos porque el mercado legítimo sufrió una dramática contracción del 19% medido en unidades y del 15,6% medido en ingresos.