Álvarez espera que Cajasur designe a un "profesional" como consejero delegado
Castillejo descarta emitir cuotas participativas
La consejera de Economía, Magdalena Álvarez, expresó ayer en Córdoba su deseo de que el futuro consejero delegado de Cajasur "sea un profesional del sector y no un profesional del PP". Álvarez respondía así ante el hecho de que se baraje para este cargo, que lleva aparejada la vicepresidencia ejecutiva de Cajasur, el nombre del abogado Francisco Jiménez Becerril, hermano del que fuera concejal del PP en el Ayuntamiento de Sevilla Alberto Jiménez Becerril, asesinado por ETA, junto a su esposa, en enero de 1998.
Álvarez dijo que lo único que le preocupaba es que la persona designada esté "técnicamente preparada para llevar a cabo esa responsabilidad, que debería ser un profesional de la banca, un profesional del sector, no un profesional del PP".
Magdalena Álvarez afirmó que "ése debe ser el perfil del responsable de cualquier caja, incluida Cajasur", a lo que añadió que si finalmente es "una persona del PP" se demostrará que la intención de este partido era "desembarcar" en la entidad cordobesa, algo que para la consejera de Economía "es evidente".
Por otra parte, fuentes de Cajasur citadas por Europa Press han confirmado que el presidente de la entidad, el sacerdote Miguel Castillejo, afirmó el pasado viernes, durante un consejo de administración, que "personalmente" no es partidario de que la caja emita cuotas participativas, una especie de acciones que no dan derecho de voto a sus titulares. El Gobierno andaluz siempre ha sostenido que las cuotas participativas son un mecanismo para iniciar la privatización de Cajasur.
En este sentido, la consejera indicó que para emitir esas cuotas "todas las cajas de ahorro andaluzas tienen que tener la autorización de la Junta". Señaló además que "las cuotas participativas conllevan el riesgo de la privatización de las cajas, ya que es una entrada del capital privado".
Asimismo, el portavoz del Gobierno andaluz, Enrique Cervera, aseguró ayer que le produce "bochorno" el ejemplo de "falta absoluta de austeridad de quien desempeña un ministerio tan importante", como es el caso de Miguel Castillejo, que protagonizará diferentes actos el próximo sábado en Sevilla (una misa en la Catedral y un encuentro en el Palacio de Congresos) para conmemorar sus bodas de oro como sacerdote.
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