El PP cierra su crisis en Jaén con una fuerte lucha por Urbanismo

El PP ha dado por finalizada la grave crisis que estaba afectando a la gobernabilidad del Ayuntamiento de Jaén, donde ocho de los 14 concejales populares, entre ellos el presidente provincial, se habían negado a asumir las delegaciones asignadas por el alcalde por no ser las que se habían pactado con las direcciones provincial y regional.

Tras dos días de reuniones, la cúpula regional del PP ha consensuado una nueva lista de concejalías, la tercera en dos semanas, y ha impuesto la paz a los dos sectores enfrentados, el liderado por el alcalde, Miguel Sánchez de Alcázar, y el de los disidentes afines al presidente provincial, José Enrique Fernández de Moya.

Ambos grupos, que han protagonizado una enconada lucha por el control del área de Urbanismo, mantienen un distanciamiento que no ocultan desde el ecuador de la pasada legislatura, como consecuencia del enfrentamiento interno que produjo el llamado caso Bariloche, que tuvo en el punto de mira judicial al concejal de Urbanismo, Miguel Segovia, por haber demorado la ejecución de un vial que debía atravesar la discoteca de la que él fue accionista.

Segovia, que fue exculpado por los juzgados, ha sido el principal elemento de discordia en la confección del equipo de gobierno. La dirección provincial del PP, que intentó sin éxito que quedara fuera de la lista, quería alejarlo del área de Urbanismo. El alcalde ha cedido, pero a cambio ha fortalecido el papel de Segovia, su mano derecha, situándolo al frente de la nueva Concejalía de Presidencia, con funciones de coordinación, además de ratificarlo como primer teniente de alcalde. Además, el alcalde sigue controlando Urbanismo, donde ha nombrado a otro de sus hombres de confianza, Manuel Peragón. La única concesión de Sánchez de Alcázar a la dirección ha sido la portavocía, que ocupará la secretaria provincial, Inmaculada Solar, y el área de Hacienda.

La presidenta del PP andaluz, Teófila Martínez, negó ayer la existencia de ninguna crisis. Lo que ha habido, dijo, es una "disparidad de opiniones".