El Defensor del Débil de Cáritas ha recogido más de 2.000 protestas de los madrileños más desfavorecidos

El Defensor del Débil de Caritas Madrid, una figura creada por esta ONG para defender los derechos de los ciudadanos más desfavorecidos de la región, ha recogido y tramitado más de 2.000 quejas sobre el funcionamiento de los poderes públicos. Con esta iniciativa, ya en marcha en veinte parroquias madrileñas, lo que se pretende es facilitar la comunicación entre la Administración pública y los madrileños que sufren la exclusión social.

Cáritas ha puesto al alcance de estas personas unos impresos u hojas de derechos en los que pueden plantear sus quejas a las instituciones. Luego, una red de 41 abogados voluntarios distribuidos en 30 puntos de la Comunidad se encargan de presentarlas ante el organismo correspondiente. Si pasados tres meses la Administración no responde, el Defensor asume la responsabilidad de "hacer resonar la denuncia de aquellas actuaciones que no se han atendido". En 2003 se pretende que sean medio centenar las parroquias que dispongan de esta figura.

Julio Beamonte, director de Cáritas Madrid, explicó ayer, durante la presentación de la memoria anual de esta ONG, que el Defensor del Débil pretende ser "la voz del que no tiene voz para que estas personas puedan recuperar su dignidad".

En Madrid hay de 400.000 a 450.000 pobres, de los que cerca de 100.000 sobreviven con menos de 150 euros al mes. En total son cerca de 27.000 las familias más necesitadas, buena parte de ellas inmigrantes, y la mayoría vive en los distritos de Centro y Carabanchel.

Para el próximo año Cáritas prevé abrir una residencia para ayudar a los ciudadanos con problemas psíquicos. "Hay personas con problemas de salud mental que tienen alguna clase de marginación y que carecen de recursos económicos para pagarse algún tratamiento. En Madrid no existe ningún centro como el que queremos abrir", añadió Beamonte. Otro de los proyectos para 2004 es finalizar la construcción de 120 viviendas de integración social, dirigidas a ofrecer techo y apoyo social y laboral durante dos años a familias y personas sin recursos.

Cáritas, con 465 puntos de atención en la región, contó en 2002 con un presupuesto de 12.437.856 euros, el 63% de él procedente de donativos.

Con motivo de la celebración del Día de Caridad, que tendrá lugar el próximo jueves 19 de junio en las calles, y el 22 de junio en las parroquias, esta ONG presentó su lema "Hagamos posible la esperanza" para pedir la colaboración de los madrileños en la colecta que se realiza todos los años y que el año pasado ascendió a 997.861 euros.