Avenida de Daroca
Soy un vecino de Vicálvaro que desde hace más de un mes sufre por el corte definitivo de la avenida de Daroca. El tiempo de desplazamiento a mi trabajo se ha incrementado en más de media hora, por no hablar del incremento en gasto de gasolina y demás. Supongo que también están sufriendo los vecinos de Moratalaz, que ven cómo cientos de coches pasan a todas horas por la puerta de su casa.
Esto ha hecho que la indignación de los vecinos contra los gobernantes municipales y regionales del PP crezca día a día de manera proporcional a nuestra sospecha de que el corte de dicha avenida responde a algún interés poco claro y, desde luego, no confesado, pues, siendo la R-3 una autopista de peaje, no podemos entender el grave prejuicio que se le va a ocasionar a decenas de miles de personas y que hasta ahora nadie se haya molestado en explicarnos nada, y digo hasta ahora porque ayer, tres días antes de las elecciones, mi mujer recibió una carta escrita por la concejal de Vicálvaro en la que se le dice que el PP, el mismo que ha cortado nuestro acceso, está buscando soluciones, y se aportan algunas de ellas.