La Caja Vital renuncia a presentar un recurso contra la reforma de la Ley de Cajas

La Caja Vital Kutxa no presentará ningún recurso contra la reforma de la Ley de Cajas de Ahorros de Euskadi aprobada la pasada semana por el Parlamento vasco, por entender que "no tiene legitimidad procesal al efecto". Así lo decidió hoy la Comisión Ejecutiva de la entidad alavesa, que en la reunión celebrada acordó "respetar" cualquier iniciativa de estas características (otro recurso) "que pudiera presentarse desde otras instancias". Precisamente, fuentes del PP confirmaron ayer que la Administración central sí prepara una posible impugnación de la norma ante el Tribunal Constitucional.

La reforma de la Ley de Cajas vasca se produjo para adaptarla a la Ley Financiera aprobada el pasado diciembre en el Parlamento en Madrid. La ausencia de siete parlamentarios en el pleno de pasado día 7, entre ellos dos populares y dos socialistas, facilitó la aprobación de la norma, que tan solo apoyaron los diputados de los partidos que respaldan al Gobierno (PNV, EA e IU). Los dos partidos no nacionalistas de la oposición (PP y PSE) entendieron que algunos preceptos de la ley tienen una clara intencionalidad política por parte de los nacionalistas, para hacerse con el control de la Caja Vital y facilitar así la fusión con las otras dos cajas de Vizcaya y de Guipúzcoa. Además, aseguraron que el proyecto roza la constitucionalidad.

Ya en el pleno del día 7 los populares anunciaron la intención de recurrir la norma. Ayer confirmaron a este diario la voluntad de la Administración central de presentar un recurso que ya tienen muy avanzado. El recurso ante el Tribunal Constitucional podría suspender la aplicación de la parte de la ley que fuera impugnada.

Adaptar los estatutos

La relevancia de la suspensión o no de la norma pasa por la necesidad de adaptar los estatutos de las cajas a la misma o no. En todo caso, las entidades de ahorro vascas deberán adaptar sus estatutos antes de julio, en asamblea extraordinaria, a la Ley Financiera, y a la ley vasca si no se suspende vía recurso.

La principal novedad de la norma vasca es la fórmula que regula la participación en los órganos de gobierno de las cajas de las oficinas y empleados de fuera del territorio natural. La vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, explicó el día de la aprobación del proyecto por el Consejo de Gobierno que se ha adoptado la fórmula catalana, que regula y limita esa presencia mediante un fórmula matemática que relaciona el número de oficinas con los depósitos y el número de habitantes y establece un porcentaje de participación. En el fondo, se trata de una lucha por el control político. Es precisamente este punto el más polémico y el motivo del anunciado recurso.

La ley mantiene las horquillas del texto de 1991 respecto al número de consejeros y miembros de la asamblea. El Consejo de Administración de cada caja puede tener entre 11 y 17 miembros y la asamblea, entre 60 y 120. Establece que los 12 años de permanencia máxima para el presidente y los consejeros que permite la Ley Financiera se repartan en cuatro mandatos, con nombramiento irrevocable hasta que se agote el periodo. La ley se acoge a las indicaciones europeas de que las instituciones públicas no ocupen más de un 50% de los órganos de gobierno (hasta ahora era un 54%). Este 50% se reparte en un 20% para las entidades fundadoras y otros 30% para los ayuntamientos.

Otro de los efectos de la norma vasca es la convocatoria de elecciones para renovar las asambleas el próximo otoño, pocos meses después de que se constituyan los ayuntamientos. Con la anterior legislación, y atendiendo a los estatutos de las cajas, este proceso se hubiera producido en 2004.

Por otro lado, las comisión ejecutiva de Caja Vital propuso ayer la convocatoria de una nueva asamblea con el objetivo de adaptar a la nueva ley, dentro del plazo establecido, los Estatutos y el reglamento de procedimiento de designaciones de miembros de órganos de gobierno de la Caja Vital. Esta entidad celebrará el próximo día 23 de mayo su asamblea general ordinaria para la aprobación de la memoria, balance y cuenta de resultados correspondientes al ejercicio 2002. La Vital es la única de las tres cajas vascas que no la ha celebrado aún.