La Generalitat reclama 530 millones de euros a la Diputación de Barcelona

"Las sentencias están para cumplirlas". Así de contundente se mostró ayer el conseller en cap de la Generalitat, Artur Mas, al exigir a la Diputación de Barcelona que aporte su parte al Plan Único de Obras y Servicios de Cataluña (PUOSC), cifrada en 530 millones de euros desde 1988. El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha emitido ya 19 sentencias, todas ellas favorables al Gobierno catalán.

Las sentencias corresponden a la etapa 1988-1999, y aún quedan pendientes las del periodo 2000-2003, con lo que la cifra reclamada podría ser aún mayor.

El Ejecutivo catalán mantiene un contencioso con la Diputación de Barcelona desde 1988 por ser "la única institución provincial que se niega a aportar recursos financieros al PUOSC", según recordó ayer el portavoz del Gobierno y consejero de Política Territorial y Obras Públicas, Felip Puig. El PUOSC tiene como objetivo otorgar ayudas económicas para financiar obras y servicios locales.

La Diputación, que sostiene que el plan es un instrumento desprestigiado por el sectarismo con que el Gobierno de CiU adjudica las inversiones a los municipios, puso en marcha en esos años el Plan de Cooperación con la Administración Local (PCAL), que recientemente ha sido sustituido por el Programa Xarxa Barcelona.

Tanto Puig como Mas reconocieron que la Diputación puede presentar recurso ante el Tribunal Supremo, pero la instaron a que deje de marear la perdiz porque "los fallos del TSJC se basan precisamente en sentencias anteriores del Tribunal Constitucional y del Tribunal Supremo".

A pesar de su tono imperativo, el conseller en cap aseveró que "la Generalitat ha demostrado una y mil veces su voluntad dialogante, pero tiene que mostrar una actitud positiva". Mas señaló que su Ejecutivo ya ha estado mucho tiempo aguantando, "mientras que desde la Diputación de Barcelona han estado haciendo cosas que no podían hacer. Nosotros no tenemos ganas de ir contra la Diputación de Barcelona, pero no podemos dejarnos arrebatar competencias", subrayó.

En este sentido, Mas invitó a ERC, que forma parte del equipo de gobierno de la Diputación de Barcelona junto con el PSC e ICV, a que "como partido nacionalista defienda las competencias de la Generalitat y adopte una posición favorable a pagar" al Gobierno catalán.