Fomento asegura que el fuel que pierde el 'Prestige' deriva "hacia América"

El fuel que sigue fluyendo de los restos del petrolero Prestige, hundido a 140 millas de Finisterre, deriva hacia el oeste y el suroeste, es decir, "hacia América", aseguró ayer el comisionado del Ministerio de Fomento para la catástrofe, Francisco Alonso. Fomento también negó la información que la Xunta de Galicia y Salvamento Marítimo (Sasemar) -organismo que depende del propio ministerio- habían divulgado el lunes en su ciberpágina sobre la presencia de nuevas manchas de chapapote frente a la costa gallega.

El ministerio optó por el método que usa Portugal para seguir la deriva de los vertidos

La Xunta admite que en los últimos días se han advertido nuevas concentraciones de fuel, pero las atribuye a restos del lavado de sentinas de buques que navegan por la zona.

Después de un mes sin que se advirtiese la presencia de chapapote entre el lugar donde se hundió el Prestige y la costa gallega, el avión de reconocimiento Reno 62, del Ejército del Aire, informó el domingo de que había avistado cuatro nuevas concentraciones de fuel a una distancia de 47 a 91 millas de las Rías Bajas. La principal era un conjunto de "ocho manchas marrón denso de 10 kilómetros por 300 metros".

Los tripulantes del avión también informaron de la presencia de otra mancha marrón de 400 metros cuadrados, un reguero de bolas de un kilómetro por 50 metros y diversos rastros aceitosos. Así se hizo constar en la ciberpágina oficial que da cuenta de la situación diaria de los vertidos.

Pese a lo minucioso de la descripción, el comisionado de Fomento aventuró que los pilotos pudieron haber tenido una apreciación errónea por "el reflejo de unas nubes, la sombra del propio avión o un cambio de coloración en las aguas". El consejero de Pesca de la Xunta, Enrique López Veiga, aunque dio por buena la información de Fomento, subrayó que en la zona "se están avistando muchas manchas" procedentes "de limpieza de sentinas o de distinto origen (...) No hay razones para pensar que sean del Prestige", agregó el consejero.

El comisionado de Fomento explicó que los avistamientos del domingo no fueron verificados en los vuelos del lunes. La comprobación desde el mar no se pudo realizar hasta ayer, cuando el remolcador Ría de Vigo acudió a la zona donde se supone que estaba la principal concentración de fuel, sin obtener resultados en sus rastreos según Alonso.

Un portavoz oficial de la comisión de seguimiento del Prestige ya aseguró el lunes que un barco había comprobado la inexistencia de la mancha. Sin embargo, el portavoz no precisó el nombre del buque que había realizado la supuesta inspección.

Fomento y la Xunta también enviaron ayer un helicóptero con dos reporteros de televisión "para que fuesen testigos", en expresión de Alonso. El aparato peinó la zona donde se supone que está la mancha principal y no observó nada, aunque sus tripulantes explicaron que las condiciones del mar, con olas de tres a cuatro metros, hacían muy difícil avistar señales de contaminación, informa Europa Press.

El representante de Fomento tampoco pudo precisar si el Prestige sigue vertiendo, a casi 4.000 metros de profundidad.En las últimas inmersiones del batiscafo francés Nautile, hace dos meses y medio, se había calculado una pérdida de una o dos toneladas diarias. "En la zona se ven únicamente unas gotas fraccionadas, como si el fuel saliese a borbotones", dijo Alonso. Tras su último vuelo por la zona del hundimiento, los pilotos del avión Reno 62 reseñaron la presencia de "manchas y regueros aceitosos" en un área de tres millas. El pasado mes de marzo, Fomento decidió seguir el método usado para seguir la deriva de las manchas por el Instituto Hidrográfico Portugués desde el día siguiente al hundimiento del Prestige. Para ello, lanzó tres boyas en el lugar donde se encuentra el pecio del barco. Del rastreo posterior se deduce que las corrientes alejan los vertidos hacia el oeste.

Por otra parte, un cazaminas de la Armada, el Turia, tomará desde mañana muestras de los fondos marinos en la ría de Muros y en la Costa da Morte para comprobar si están afectados por los vertidos. El buque utilizará sondas que alcanzan 200 metros de profundidad. Dos estudios anteriores han comprobado la presencia de restos de chapapote diseminados por los lechos marinos de la Costa da Morte. El primero fue realizado por especialistas de la Universidad de A Coruña, a iniciativa de las cofradías de la zona. El más reciente lo promovió el Instituto Español de Oceanografía y se realizó mediante prospecciones con redes de arrastre. En el 80% de los casos, el aparejo se izó manchado.