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GUERRA EN IRAK | El avance de la coalición

Las reservas de alimentos de los iraquíes se agotarán en tres semanas

Las organizaciones humanitarias en Ammán esperan volver pronto a la zona del conflicto

Las despensas de los iraquíes quedarán vacías dentro de tres semanas, aseguraban ayer portavoces de las organizaciones humanitarias exiladas en Ammán. Su única esperanza es poder regresar cuanto antes a Irak, para reanudar desde el interior del país la distribución de las ayudas a más de 16 millones de habitantes. "Pero antes tenemos que comprobar la situación de seguridad sobre el terreno, sólo así los responsables de la ONU nos dejarán volver al país", afirmaba ayer Martin Roest, portavoz oficial del Programa Mundial de Alimentos, una de las principales agencias humanitarias de la ONU.

"No tenemos información de que falten por ahora alimentos en Irak. La mayoría de los habitantes tiene comida suficiente hasta final de mes. Sin embargo, a partir de esta fecha empezarán a escasear los productos primordiales", anunciaba Roest en la capital jordana. Él y su equipo de expertos internacionales tuvieron que abandonar Bagdad de manera precipitada poco antes de iniciarse la guerra. Dejaron atrás una red de distribución de alimentos compuesta por cerca de 40.000 personas, que habían repartido ayudas durante los últimos nueve años. Hacían llegar a 16 millones de iraquíes cada mes un paquete con 10 productos básicos, incluido detergente.

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Barricadas en el centro de Bagdad

Desde el verano, en previsión del conflicto, esta agencia duplicó las ayudas a las familias necesitadas, aunque los responsables del programa son conscientes de que muchos de estos productos se vendieron inmediatamente en el mercado negro para obtener dinero con el que hacer frente a otras necesidades.

Las declaraciones de Roest coinciden con la de otros técnicos, como Carel de Rooy, responsable de Unicef en Irak. Su organización llevaba una campaña de vacunación masiva de los niños y un plan para asegurar el agua potable de las principales ciudades. Pero el responsable de Unicef sabe que las previsiones se quedaron cortas, el verano se les ha venido encima y el agua potable ha empezado a escasear. "Unicef necesitará 166 millones de euros para cumplir sus misiones en los próximos seis meses", insiste De Rooy.

Las organizaciones humanitarias lo tienen todo preparado para volver a Irak. Así lo afirmó en Ammán uno de los portavoces de la ONU en la zona, Nejib Friji. Subrayaba que los almacenes de los países vecinos están llenos y que sólo falta la señal de partida.

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