España adelanta a Rusia el dinero del viaje de Duque para mantener la Estación Espacial

Con este acuerdo alcanzado por los socios de la ISS se afronta la crisis debida a la falta de dinero de la parte rusa para construir las ahora imprescindibles cápsulas Soyuz y las naves de carga Progress, a lo que se suma la imposibilidad legal alegada por EE UU de pagar por estos servicios de transporte espacial a Rusia, ha explicado Jochen G. Graf, un responsable del programa de la ISS en ESA. Duque, cuyo vuelo estaba planeado para finales de mes, saldrá al espacio en octubre o noviembre en un vuelo corto, de duración aún no definida, según el acuerdo entre la ESA y Rosaviakosmos. El holandés lo hará dentro de un año. El pacto alcanzado por los socios de la ISS supone adelantar los pagos de los vuelos de Duque (con cargo al Ministerio de Ciencia y Tecnología) y de Kuipers respecto a la fecha de prestación del servicio, pero no pagar más, aclaró Graf.

Rusia ha recibido ya más de dos millones de dólares del pago de España y el resto se realizará en entregas escalonadas, aunque aún no se ha firmado el contrato definitivo sino un acuerdo denominado Autorización Preliminar para Proceder, explicó Graf, jefe del Departamento de Preparación y Explotación de la ISS de la ESA, en ESTEC, el centro científico y tecnológico de la agencia en Noordwijk (Holanda). "El dinero de estos vuelos permite a los rusos acelerar la construcción de las Soyuz y de las Progress; Rusia necesita esta financiación también para construir sus propios equipos de la ISS, no quiere ser sólo proveedora de servicios", comentó el responsable europeo. La NASA afirma que no puede pagar a Rusia la factura correspondiente por el transporte de astronautas y material dado que una ley del Congreso prohíbe en principio dichos pagos. "La clave es Estados Unidos", recalcó Graf. En el programa de la ISS los socios no se pagan unos a otros sino que cada uno hace las aportaciones correspondientes, recordó.

El vuelo de Duque empezó a gestarse hace algo más de un año, cuando España se apuntó a la oferta de Rusia reservando una plaza de pago en los llamados vuelos-taxi a la ISS con cápsulas Soyuz. Estos son vuelos obligados cada seis meses para reemplazar estas naves que sirven como vehículo de emergencia y Rusia también los comercializa para turistas. En el caso de los astronautas profesionales europeos, como Duque, la misión se gestiona y se paga a través de la ESA, aunque el país interesado se hace cargo de la factura. "Estos vuelos tienen gran interés para la agencia y también para los países miembros que tienen interés en mandar a un astronauta suyo al espacio", aclaró Graf. Pero el dinero del vuelo "está al margen del programa normal obligatorio de la agencia", recalcó. Sin embargo, la delegación de España en la ESA, que desempeña el Centro para el Desarrollo Tecnológico e Industrial (CDTI), del Ministerio de Ciencia y Tecnología, comunicó esta semana a El PAÍS que desconocía cuánto se había pagado ya a Rusia por el vuelo de Duque. Asimismo, Emilia Buergo, encargada de este tema en el CDTI, a través del gabinete de prensa de Ciencia indicó que dicho dinero (13 millones de euros, según España), lo paga la ESA y forma parte de la contribución española a la agencia. Este argumento ha causado sorpresa en la ESA dado que, aunque este organismo internacional firma el contrato con Rusia, es el país interesado en enviar su astronauta al espacio (como antes Italia o Bélgica) quien costea la operación como programa voluntario al margen del programa obligatorio. Además, en la ESA cada país miembro no sólo está pendiente de la marcha del programa obligatorio, sino que vigila y controla muy de cerca su inversión en los programas opcionales en los que participa.

Ciencia decidió en 2000 dedicar unos 600 millones de euros entre 2002 y 2006 a actividades de la ESA, lo que incluye la cuota que cada país miembro tiene que aportar para el programa normal de la agencia y la participación en los programas voluntarios. El vuelo de Duque se incluye en este último apartado, susceptible de emplearse en una gama de desarrollos de la ESA acompañados, excepto en el caso de este vuelo Soyuz, de un retorno en forma de contratos para las empresas españolas por valor equivalente al dinero invertido por el país. Dado que los astronautas de la ESA son profesionales con entrenamiento y desempeñan en la Soyuz funciones de vuelo, Rusia cobra menos de los 20 millones de dólares de tarifa de los turistas espaciales.

El plan de los vuelos con plazas de pago, que estaban inyectando el imprescindible dinero fresco al arruinado sector espacial ruso, ha quedado alterado por el accidente del Columbia. La tripulación permanente va a quedar reducida a dos personas a partir de mayo. En estas condiciones, Graf no especificó la duración del vuelo de Duque en octubre en la ISS, que podría reducirse a tres o cuatro días.