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Columna
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Colapso

No sabe uno si es mejor que se quede quieto y sin abrir la boca Álvarez Cascos o que baje a tierras andaluzas por carretera. Veamos. Días atrás, en Despeñaperros, un grave accidente produjo largas colas de hasta quince kilómetros para entrar en Andalucía, ante la desesperación de miles de conductores. En la radio, Álvarez Cascos hacía loor y alabanza de lo bien que lo hace; primero él, claro, y después el Gobierno. Cascos no necesita abuela. Hasta que no se duplique la entrada a Andalucía nuestro futuro no es futuro. La culpa la tiene González, diría Arenas, porque desde 1982 a 1996 que gobernó pudo hacerla.

Pues es posible, pero eso no disculpa a Aznar y a su Gobierno. A Aznar no le gusta Andalucía. Se siente incómodo en nuestra tierra. Cuando tiene que bajar al Sur siente retortijones. No lo digo yo, lo hablan en el seno de Génova (sede central-derecha del PP). Y hasta ha sido en Andalucía donde más se le han sublevado sus mesnadas. Aznar no perdona. Pero a lo que iba. Si Despeñaperros es un problema, no hay semana que Las Pedrizas, ya en la provincia de Málaga, no se convierta en un impresionante embudo. En el último mes padeció impresionantes colapsos en una vía que es el acceso principal a Málaga, la Costa del Sol y Algeciras, por no decir único. El último atasco generó un colapso que duró más de quince horas. ¿Se imaginan ustedes si esto sucediera en verano, en los días en que miles de coches llegan a esta zona turística con miles de marroquíes, cargados de sueño y de kilómetros camino a su tierra? Esta es una de las arterias viarias con más tránsito de España y desde Las Pedrizas la carretera es un puro bache, con badenes que hacen saltar como en un tiovivo a los coches, difíciles de manejar cuando se superan los cien kilómetros. Son 44 kilómetros peor que en Dakar. Obras previstas desde 1998 y que, ahora, cinco años después, se harán. Algo es algo. Se imponen soluciones. En Despeñaperros para que deje de ser el separador de Andalucía y, aunque haya que apretarse el bolsillo, la autopista de peaje desde Antequera hasta llegar a Torremolinos, previo estudio de impacto ambiental, algo que demandan diversas asociaciones. ¿Será mucho pedir a Cascos?

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