Lógico de lo peor
¿Está destruida la ONU? No lo sentiría demasiado. Desde hace muchos años se viene haciendo su triste funeral diciendo que "es mejor que exista", como si la alternativa -la nada- fuese peor. La he visto a lo largo de su vida cometer toda clase de tropelías; vivir algún momento de esperanza, como cuando la Asamblea General empezó a nutrirse de los países que acababan de obtener su independencia hasta que esos países fueron liquidados. Están allí, pero su voz suena a hueco y a veces no se atreven ni a pronunciarla, como el bloque de los llamados "indecisos" en el Consejo de Seguridad: angustiados, en realidad, entre el castigo que podría caer sobre ellos por estar contra Estados Unidos y por otro lado enfrentarse a sus opiniones populares. Son también continentes de señores, como África, y no de pueblos. Y como España.
Los Tres Caballeros de las Azores trabajan así: en el Reino Unido la opinión está contra la guerra en una proporción del 75%, en España sobrepasa el 80% y en EE UU es más de la mitad. A Blair se le escapan diputados y ministros; no creo que tengan una sensibilidad especial por los muertos de la guerra, porque tienen una larga historia reciente de colonizaciones sangrientas, entre ellas la de Irak, y unas pérdidas que vengar. Y todavía restos del socialismo fabiano, que fue en realidad un invento de los intelectuales irlandeses de Londres. En España no pueden hacer nada los aznáridas; o siguen con él, o se van a la calle. No sirven para otra cosa. No hay más que verles y oírles, y leerles, para ver quiénes son. No sé si la estulticia es de nacimiento, genética, como dice la nueva ciencia o como he creído yo siempre, de situación: gentes inteligentes metidas en una situación imbécil tienen que hacerse imbéciles para subsistir. Lo malo es que se les convierta en algo crónico.
La ONU y el Consejo de Seguridad se han ido convirtiendo en una situación tonta, a la que resisten mal los que van a ella; si es que resisten. No sé qué pasó anoche, ni sé claro lo que va a pasar hoy, o está pasando ya, pero se sabe que la Organización de las Naciones Unidas nunca será ya lo que fue (lo que se supuso que debía ser: una libertad de todos, grandes y pequeños; un rechazo a la fuerza y a la guerra; unos derechos del hom... Bueno, ya está bien). Ni Aznar va a levantar el soufflé una segunda vez. Ni los muertos de ahora mismo volverán a vivir.
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