La Fiscalía del TSJA duplicó en 2002 la apertura de diligencias por violencia de género en Granada

La Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía detectó el año pasado un espectacular aumento de la criminalidad relacionada con la violencia de género y el maltrato familiar en la provincia de Granada. Las diligencias previas abiertas por la Fiscalía relacionadas con este tipo de hechos han pasado de 209 en 2001 a 400 en el último año. Este crecimiento "es también una tendencia en toda Andalucía", según expuso el fiscal jefe, Jesús García Calderón, que abogó por la creación de jueces y fiscales especializados en este tipo de procedimientos.

García Calderón adelantó ayer algunos datos sobre causas relacionadas con la violencia de género de la memoria de 2002, que no estará concluida hasta principios de abril. En el último año hubo 82 procedimientos abreviados, frente a los 60 de 2001. Las amenazas, lesiones y vejaciones fueron las faltas más comunes que se vieron en los 564 juicios celebrados, que también han supuesto un gran aumento respecto al año anterior, en el que hubo 363 procesos de este tipo.

Otro de los datos que el fiscal puso de relieve, por su especial importancia a la hora de adoptar medidas en contra el maltrato doméstico, fue la reiteración de los hechos violentos. En 34 ocasiones se han registrado tres episodios de este tipo protagonizados por el mismo agresor. Incluso hay un caso en el que la misma persona es responsable de siete hechos de maltrato.

García Calderón fue galardonado ayer en Granada con uno de los premios Meridiana 2003 que entrega el Instituto Andaluz de la Mujer por el "alto grado de sensibilidad mostrado" sobre el problema de la violencia de género, un asunto que se convirtió en tema central de casi toda la ceremonia de entrega.

El fiscal mostró en este acto su "frustración" porque "el enorme esfuerzo de las instituciones en la lucha contra la violencia de género no consigue resultados positivos". A su juicio, "hay que insistir en la formación y en la especialización de los jueces, los fiscales, los forenses y los funcionarios".

García Calderón puso de manifiesto su preocupación por las "realidades criminales ocultas", en referencia a la violencia contra niñas, ancianas o mujeres discapacitadas que no se conoce.

La Plataforma de Mujeres Artistas contra la Violencia de Género recibió otro de los premios Meridiana por la lucha que cantantes y actrices famosas han emprendido aprovechando su relevancia social. Raquel Orantes, miembro de honor de esta agrupación, dedicó el premio a las 19 mujeres muertas este año a manos de sus parejas y, en especial, a su madre, Ana Orantes, que fue quemada por su marido en Granada hace unos años. Recogió este premio la cantante Cristina del Valle, quien criticó duramente al Gobierno central, por su "falta de voluntad política" para atajar este problema.

La artista demandó la aprobación de una ley integral contra la violencia de género y una mayor implicación de los ministros, a quienes reprochó no haber acudido a algún funeral de cualquiera de las mujeres muertas.

La entrega de los premios Meridiana se convirtió también en un acto contra de la guerra, en el que la mayor parte de los asistentes lucía pegatinas con palabras de rechazo a un posible conflicto bélico.

El resto de premiados fueron la Agrupación de Mujeres Periodistas de la Asociación de la Prensa de Granada y la empresa de inserción laboral Remiendo Genil, formada por varias mujeres de la zona norte de Granada, uno de los barrios más deprimidos de la ciudad. En cuatro años, esta empresa de costura ha conseguido contratar a cuatro nuevas trabajadoras que también se encontraban en situación de conflictividad laboral.