El Ejército turco apoya la presencia de soldados de EE UU en su territorio

El Ejército, una de las instituciones más poderosas en Turquía, expresó ayer su apoyo al despliegue de los soldados estadounidenses en el país y añadió así una dosis más de confusión en la complicada disyuntiva turca. El estamento militar, defensor del laicismo en el país, se alineó con las tesis del Gobierno, de tendencia integrista islámica moderada, lo que podría dar alas al Ejecutivo para volver a intentar que el Parlamento autorice la entrada de 62.000 soldados norteamericanos en Turquía. "La opinión del Ejército turco es la misma que la del Gobierno, y quedó reflejada en la demanda cursada al Parlamento", dijo ayer el jefe del Estado Mayor del Ejército turco, general Hilmi Ozkok.

Hasta ahora, el Ejército se había apartado de la polémica que domina la política turca desde hace un mes para que su opinión no afectara a la decisión de los diputados, dijo Ozkok. "Si hubiéramos aconsejado algo al Gobierno justo antes de la votación, habría sido como presionar al Parlamento. Eso no es democracia, además de ser anticonstitucional", explicó Milmi Ozkok.

El jefe del Ejército aseguró que la presencia de EE UU abriría un frente norte en Irak y acortaría la guerra y, además, evitaría que ocurriesen "acontecimientos imprevisibles", en referencia a la posibilidad de que los kurdos declaren su independencia tras la caída de Sadam.