Ninguno de los más de cien afectados por el síndrome Ardystil está clínicamente curado once años después
Ninguno del centenar de operarios afectados por el síndrome Ardystil -afecciones pulmonares de diverso grado por inhalación de productos químicos en fábricas de aerografía textil de L'Alcoià- está "clínicamente curado" once años después, según declararon ayer ante el tribunal especialistas en neumología de la Fe de Valencia. Estos dos expertos, que atendieron a 27 trabajadores enfermos, aseguraron que todos los afectados presentan secuelas y, en los casos menos graves, han de someterse al menos a una revisión médica anual. "En otros casos, las consecuencias podrían desencadenar patologías desconocidas", precisaron.
Los neumólogos apuntaron que el conjunto de afectados por el síndrome Ardystil presentaban un cuadro clínico homogéneo producto de la exposición a sustancias tóxicas utilizadas en las fábricas -colorantes y disolventes- aunque precisaron que, a su juicio y en base a los distintos informes epidemiológicos, el desencadenante del síndrome pudo ser el cambio de formulación en unos de los productos utilizados, en concreto el Acramín, suministrado por la química Bayer. Estos expertos basaron su afirmación en los experimentos científicos realizados por investigadores belgas, que en 1996 determinaron que una sustancia de ese producto, la poliaminamida, era tóxica. Esta tesis también fue compartida por un experto del Instituto Nacional de Toxicología. No obstante, este perito matizó ante el tribunal que el origen del síndrome fue "multicausal" y que se podría haber evitado con mejores condiciones higiénicas en las fábricas y medidas preventivas de seguridad.
En esta nueva sesión del juicio que se celebra en la Audiencia de Alicante también declaró una forense que analizó la autopsia de la primera de las seis víctimas mortales. La médico certificó que que la causa del fallecimiento fue una fibrosis pulmonar.
