"Necesité un doble disfraz para interpretar a la escritora"
Nicole Kidman se presentó ante la Berlinale despojada de la prótesis nasal usada en Las horas para representar a la masculina Virginia Woolf, con su aura de mujer romántica y confiada en encontrar al hombre de su vida. "Algún día vendrá mi príncipe azul", dijo la actriz australiana, de nuevo con su habitual look rubio y afilada nariz. Kidman, irreconocible en el filme como consecuencia de la ardua labor de maquillaje, dijo que no podía computar en horas el tiempo empleado en su caracterización. Explicó, en cambio, que había necesitado un doble disfraz, una doble caracterización: la física y la mental, para adaptarse a la fuerte personalidad de Woolf, su conflicto existencial y su debate entre seguir viviendo, enferma y a merced de los demás, o el suicidio. "Se trataba no sólo de definir mi nariz, sino también mi personaje", explicó Kidman.
Por otro lado, un grupo de enviados especiales y corresponsales de la prensa en español distribuyó ayer una carta de protesta dirigida al director de la Berlinale, Dieter Kosslick, por la supresión del español de la traducción simultánea de las películas a concurso y de las ruedas de prensa. Los firmantes, quienes no se identifican y dicen hablar en nombre de "los medios acreditados de habla hispana", lamentan en la misiva que se suprimiera sin previo aviso el castellano de las cabinas de intérpretes, acusan a la organización del festival de "falta de respeto profesional" y exigen explicaciones. El texto, redactado en inglés, añade: "No nos sentimos preparados para cubrir honestamente un festival de cine de esta categoría sin comprender por completo las historias proyectadas".
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.