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El Insalud, condenado por mala atención a una paciente

Oriol Güell

La Audiencia Nacional ha condenado al Insalud por la muerte en enero de 1999 de M. L. C. M., una paciente del hospital de la Princesa de 40 años, a la que ni el médico de cabecera ni el hospital trataron de la insuficiencia renal que acabó con su vida. La sentencia concede una indemización de 120.000 euros a la madre y a la hermana de la fallecida, con las que compartía domicilio.

La sentencia relata los nueve últimos días de vida de la fallecida, cuya salud se iba deteriorando a pasos agigantados sin que los médicos de cabecera, primero, ni el hospital, después, acertaran en el diagnóstico. La mujer acudió el 17 de enero de 1999 al Servicio de Urgencias del ambulatorio de la calle del Doctor Esquerdo "presentando síntomas catarrales y se le diagnosticó un resfriado". Al día siguiente, en el que la paciente había vuelto a ir al ambulatorio, "empeoró su estado, apareciendo unas manchas en la piel, gran malestar, sequedad de boca, sudoración profusa y vómitos", relata el fallo.

La fallecida seguía encontrándose muy mal un día después, por lo que solicitó que la visitara su médico de cabecera en su domicilio. La consulta fue un día más tarde, el 20 de enero, pero en esta ocasión el diagnóstico fue "intoxicación medicamentosa".

Tuvo que pasar otro día para que la paciente, que empezó a tener problemas para respirar, fuera ingresada en el hospital de la Princesa. Allí le hicieron varias pruebas, que revelaron que padecía una "neumonía y fracaso renal". La sentencia recoge que, "ante el deterioro de su estado, se decide ingresarla en la UCI cuando se disponga de camas libres". Sin embargo, la mujer pasó más de 24 horas ingresada en planta, porque ninguna cama de la UCI estaba disponible. Finalmente, "a las 12.30 del 22 de enero sufre un parada cardiorrespiratoria que aconseja su ingreso en la UCI de inmediato".

En coma

"Tras permanecer en coma varios días, fallece el 26 de enero", continua la sentencia. La mujer murió por "una acidosis metabólica". Esto es la incapacidad de sus riñones de excretar el ácido úrico que producía su organismo y sin que en ningún momento el hospital la hubiera tratado por esta dolencia.

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Un día antes de su muerte, la familia de la fallecida presentó una reclamación al hospital por el "tratamiento deficiente" recibido. La Sala Cuarta de lo Contencioso-Administrativo les ha dado ahora la razón, en un fallo en el que ha actuado de ponente el magistrado José Guerrero Zaplana.

La sentencia se fundamenta en un informe médico presentado por la familia de la fallecida en el que se establece que la mujer sufrió una "falta de atención en su acidosis metabólica durante su estancia en planta y que provocó que se debiera ingresar a la paciente en la UCI sin que ya pudiera remontar su estado".

Rafael Martín Bueno, abogado de la Asociación de Víctimas de Negligencias Sanitarias (Avinesa), considera que "el hospital no puso a disposición de la paciente los medios disponibles".

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Sobre la firma

Oriol Güell
Redactor de temas sanitarios, área a la que ha dedicado la mitad de los más de 20 años que lleva en EL PAÍS. También ha formado parte del equipo de investigación del diario y escribió con Luís Montes el libro ‘El caso Leganés’. Es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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