La UPV confía en Internet para acercar a sus alumnos al mercado laboral

El acercamiento al entramado empresarial y la multiplicación de los puntos de contacto con la realidad laboral son, desde hace unos años, dos de los objetivos estratégicos de la Universidad del País Vasco (UPV). La creación en 1998 de un vicerrectorado específico de Relaciones con la Empresa es el mejor ejemplo. Uno de sus principales cometidos desde su inicio ha sido conseguir la mayor y la más adecuada salida posible de los estudiantes de la universidad pública vasca, bien a través de la realización de prácticas o bien a través de la entrada directa en el mercado de trabajo. En esta labor, el vicerrectorado dirigido por Armando Bilbao ha apostado por Internet como instrumento para favorecer y mejorar la introducción de sus estudiantes en el sistema de producción.

Desde comienzos del presente curso, la UPV cuenta con dos sistemas interactivos, Praktiges y Lanbila, diseñados en su Facultad de Informática para tal fin. Por el momento, cerca de la mitad de la treintena de centros de la universidad, 500 alumnos y 300 empresas han empezado a utilizar este servicio, en el que se han invertido 240.000 euros.

Módulo para la empresa

Praktiges, cuya dirección en Internet es www.praktiges-online.net, tiene como misión la gestión de las prácticas de los estudiantes. Se compone de dos módulos, uno destinado al alumno y otro a la empresa. En el primero, al que se accede con una contraseña dada por el centro correspondiente, se ofrecen diferentes servicios; la introducción de un completo currículo, la descripción en detalle de cada una de las prácticas, los formularios para solicitarlas o la información sobre el programa de prácticas del centro y de los servicios que pueden ayudar en la elección final. El interesado, además, decide cuál es el nivel de información que desea hacer llegar y da prioridad a unas prácticas o a otras en función de su interés.

En el segundo, las empresas incluyen sus prácticas en la página, a la que entran con una clave de acceso concedida por el centro después de que éste haya revisado y validado su propuesta. Las principales funciones de este módulo son la oferta de prácticas para los centros más adecuados, acceso al currículo de los estudiantes que hayan seleccionado sus prácticas, así como una amplia información sobre los programas de prácticas de los centros universitarios.

La estructura de Lanbila, que se puede visitar en la dirección www.lanbila-online.net, es idéntica a la anterior. Sus dos módulos tienen las mismas funciones, aunque en este caso no van dirigidas a la realización de prácticas sino a la inserción de los egresados en el mercado laboral.

La prueba del verano

Este sistema, que tiene sus precedentes en experiencias similares llevadas a cabo en Valencia y Cataluña, se enfrentará a la principal prueba de su valor en verano, época en la que se licencian las nuevas promociones y se incrementan las solicitudes de prácticas. Por el momento, el grado de satisfacción de empresas y alumnos en la Facultad de Informática, donde ha funcionado un prototipo en los últimos cuatro años, ha sido del 98%, tal y como apunta su vicedecano y promotor de la idea, Julián Gutiérrez.

Además de agilizar al máximo los procesos de búsqueda y selección a estudiantes y empresas, promover una atención individualizada y estructurar la oferta, las dos nuevas páginas web permitirán una centralización de datos y estadísticas, según resalta el vicerrector de Relaciones con la Empresa, Armando Bilbao. "En un futuro podremos cruzar los resultados de las dos aplicaciones, lo que nos ayudará a comprobar si las prácticas se materializan en puestos de trabajo y a mejorar y afinar el sistema para que empresas y estudiantes dispongan del mejor servicio", declara.