Todos los partidos creen ilusoria la cifra de 100.000 pisos lanzada por el alcalde

La decidida propuesta del alcalde de Barcelona, Joan Clos, de construir 100.000 nuevos pisos en los próximos cinco años fue recibida con cautela por los partidos coligados en el Gobierno municipal -Iniciativa per Catalunya Verds y Esquerra Republicana- y con airadas críticas de la oposición convergente y popular. Pero todos ellos coincidieron en calificar de ilusoria la cifra. "La realidad se encargará de ajustarla a la baja", apuntó el teniente de alcalde Jordi Portabella, de ERC. "Se le ha ido un poco la mano. Me parece un brindis al sol", abundó Imma Mayol, de ICV.

Con más contundencia se expresaron Joan Puigdollers, de Convergència i Unió, y Alberto Fernández Díaz, del Partido Popular, quienes la tacharon de "demagógica, electoralista y falta de credibilidad". Por su parte, el consejero de Política Territorial, Felip Puig, lamentó que el alcalde lance "mensajes contradictorios cuando ha autorizado la construcción de pisos en Diagonal Mar de más de 100 millones de pesetas".

- Esquerra Republicana. "Fue una propuesta generalista que debería concretar. Por ejemplo, ¿cómo se realizará, dónde, cuándo, y de qué tipo de vivienda estamos hablando?", se preguntó Portabella. Los republicanos apuestan claramente por la rehabilitación de viviendas, equiparando su trato fiscal al que reciben la compra y el alquiler, y en un contexto en el que el Ayuntamiento actúe de garante entre el propietario y el inquilino para "salvar así las desconfianzas mutuas". ERC apunta que existen unas 16.000 viviendas sin ocupar en Barcelona y que hay que sacarlas al mercado de alquiler. Por ejemplo, autorizando actividades profesionales en las plantas bajas de edificios, penalizando las viviendas vacías o que el inquilino asuma la rehabilitación con cargo al alquiler. Alerta, no obstante, del error que supondría la creación de pisos más pequeños dividiendo los actuales. Portabella añade que los gobiernos central y autónomo deberían cambiar sus leyes marco de vivienda.

- Iniciativa per Catalunya Verds. Imma Mayol coincide con la propuesta de Joan Clos de incentivar la construcción de viviendas más pequeñas, adaptándolas así a la demanda y a la nueva realidad social, "no sólo porque los pisos serán más baratos, sino porque ahora las unidades familiares son más pequeñas". En cambio, alerta sobre un proceso "indiscriminado" de recalificación de suelo y aboga por compatibilizar usos urbanísticos como sucede en el 22@ del Poblenou, donde conviven la actividad productiva, los equipamientos y las viviendas. La teniente de alcalde defiende el incremento de la vivienda protegida -12.000 para el próximo año- pero destinada tanto a la compra como al alquiler. "Ahora las viviendas de promoción pública se pueden vender a los cinco años y ello no frena un cierto movimiento especulativo", señala. ICV también apuesta por establecer convenios con los propietarios de pisos deshabitados.

- Convergència i Unió. Joan Puigdollers niega a los socialistas "toda credibilidad en materia de vivienda, porque desde que Clos es alcalde el precio de los pisos ha aumentado el 74,4%". "No puede hablar de construir 100.000 pisos quien se ha vendido 100.000 metros cuadrados de suelo público", agrega. Los nacionalistas reclaman la redacción de un nuevo plan urbanístico -"y no a base de poner remiendos y parches al actual"- que autorice la coexistencia de usos urbanísticos. "En diferentes profundidades o alturas un solar puede tener distintos servicios; por ejemplo, equipamientos en la planta baja y viviendas en las superiores", señala Puigdollers. CiU tiene depositadas sus esperanzas en la creación de un consorcio metropolitano de la vivienda integrado por la Generalitat, los ayuntamientos y los consejos comarcales. Este organismo dispondría de un parque de viviendas de titularidad pública destinadas a alquiler y adquiriría edificios en mal estado para rehabilitarlos y sacarlos al mercado.

- Partido Popular. "Cada año en Barcelona se construyen 4.000 viviendas y en 1999 Clos prometió unos 16.000 pisos. Su valoración ciudadana debe de estar muy mal para multiplicar por seis esta promesa", critica Alberto Fernández Díaz, candidato a la alcaldía. El PP defiende la revisión a fondo del Plan Urbanístico y la creación del consorcio metropolitano de la vivienda, y arremete contra la venta de suelo público para crear "pisos de alto standing". Asimismo, apuesta por incentivar las políticas de rehabilitación.