El Vaticano rechaza por "peligrosa" la ordenación de curas homosexuales

El Vaticano ha declarado de forma tajante su rechazo a admitir en los seminarios a jóvenes con una abierta tendencia homosexual. La relativa apertura de la Iglesia de los Estados Unidos, que se ha saldado con el mayor escándalo de abusos a menores nunca visto, ha terminado por convencer a la jerarquía de la Santa Sede, que en un reciente documento se pronuncia en contra de la ordenación sacerdotal de personas homosexuales por "peligrosa e imprudente".

La Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos señala en un informe enviado ayer a la Congregación para el Clero que es "totalmente desaconsejable, imprudente y peligrosa" la admisión al ministerio sacro de personas con tendencias homosexuales ya que, no son "idóneas".

Este comentario, en respuesta a la pregunta de un obispo, se recoge en el boletín de noviembre-diciembre de esta congregación, y todavía lleva la firma del cardenal chileno Jorge Medina Estévez, que fue prefecto de ese dicasterio hasta el pasado 1 de octubre, meses después de superar la edad de jubilación. El Papa ha nombrado para sustituirle al cardenal Francis Arinze.

La posición de la Congregación para el Culto Divino vendría a anticipar, según algunos medios próximos al Vaticano, un "manual" propiamente dicho que prepara la Santa Sede para impedir que los seminaristas homosexuales lleguen al sacerdocio. Una posición ya declarada abiertamente por la jerarquía vaticana en el encuentro de la pasada primavera con los cardenales y responsables de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos.

El escándalo de los sacerdotes pederastas, que ha puesto contra las cuerdas algunas diócesis católicas de los Estados Unidos, especialmente la de Boston, ha representado un fuerte revulsivo en la Santa Sede.

Sin embargo, el cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe (antigua Inquisición) y una de las máximas autoridades del Vaticano, denunció el miércoles en la diversidad Católica de Murcia, el tratamiento mediático que han recibido los casos de religiosos pederastas en Estados Unidos y aseguró que se trata de una campaña orquestada para desacreditar a la Iglesia católica. No llegó a explicar los motivos, aunque, seguramente tiene alguna hipótesis.