EE UU acusa a Irak de violar la resolución por un incidente aéreo
Washington aduce que los disparos en las zonas de exclusión desafían a la ONU
Estados Unidos acusó ayer al régimen de Irak de violar la resolución 1441 del Consejo de Seguridad, antes de que se reiniciaran las inspecciones de armamento en territorio iraquí. Según la Casa Blanca, los disparos efectuados el viernes contra aviones estadounidenses y británicos en la zona de exclusión del sur de Irak supusieron un desafío a la ONU.
La denuncia de Washington no fue, sin embargo, más allá de una exhibición de hostilidad verbal. Con la magnificación del incidente, el Gobierno de George W. Bush trató de soslayar la creciente inquietud del público estadounidense por las muestras de vitalidad de Al Qaeda y por la evidencia de que Osama Bin Laden, el enemigo número uno, sigue vivo y operativo.
El intercambio de fuego se produjo el viernes por la noche, hora local, sobre la localidad de Nayef, a unos 120 kilómetros de Bagdad. Una batería antiaérea iraquí disparó contra una patrulla de aviones, sin alcanzar a ninguno. Los cazabombarderos destruyeron un radar. Desde que el Consejo de Seguridad adoptó el día 8 una resolución considerada definitiva para obligar a Irak a desarmarse se han registrado 12 incidentes de ese tipo, pero la Casa Blanca y el Pentágono decidieron magnificar el de ayer.
"Consideramos que se ha producido una violación de la resolución", dijo un portavoz presidencial, apelando al apartado del texto que prohíbe a Irak atacar a "cualquier Estado miembro [de la ONU] que tome medidas para aplicar una resolución del Consejo". Ninguna resolución ampara la existencia de las zonas de exclusión aérea, creadas unilateralmente por EE UU y Reino Unido. Según ambos países, dichas zonas, vigentes desde 1991, fueron establecidas para imponer una resolución que ordenaba a Bagdad que cesara en sus ataques contra los kurdos del norte y los shiíes del sur.
Preocupa Bin Laden
Las denuncias de Washington se produjeron horas después de que fuentes de la Casa Blanca admitieran a la agencia Associated Press su creciente inquietud ante las amenazas de Al Qaeda, y ante la posibilidad de que la oposición demócrata acorralara al Gobierno con sus afirmaciones de que la obsesión por Sadam Husein había reducido la intensidad de las operaciones contra la organización terrorista. El propio Bush, en su alocución radiofónica de ayer, aseguró que la guerra contra el terrorismo estaba "avanzando en todos los frentes" y que "miles de terroristas" habían sido capturados o muertos. Bush no mencionó en ningún momento a Bin Laden, al que se considera vivo después de que emitiera un mensaje en que se felicitaba por los recientes atentados en Bali y Moscú.
El Gobierno de EE UU anunció en la noche del viernes la detención de un "dirigente importante" de Al Qaeda, sin proporcionar el nombre ni el lugar de la captura. Un portavoz se limitó a indicar que no se trataba de Bin Laden, ni de su lugarteniente Ayman al Zawahiri, ni de ningún miembro de la cúpula de la organización.
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