EE UU califica de "puro teatro" el 'no' de la Cámara iraquí a la ONU

El Gobierno de EE UU no atribuyó ayer importancia alguna a la decisión del Parlamento iraquí, que en una votación unánime recomendó a Sadam Husein que rechazara la última resolución sobre desarme del Consejo de Seguridad de la ONU. George W. Bush dijo que el Parlamento de Bagdad sólo servía para refrendar las decisiones de Husein. El portavoz de la Casa Blanca, Sean McCormack, calificó la votación de 'puro teatro político'.

McCormack, que sustituye estos días a su jefe, Ari Fleischer, en viaje de novios, comentó que la única respuesta válida era la que el presidente de Irak debía emitir antes del viernes, cuando se cumple el primer ultimátum planteado por la ONU. 'Me parece que no hay nadie que crea que el Parlamento iraquí tiene alguna incidencia sobre lo que ocurre o no ocurre en Irak. Sólo hay una voz que cuenta en ese régimen despótico', comentó McCormack, 'y es la de Sadam Husein. El resto es puro teatro político'. El portavoz estadounidense rechazó también las propuestas de Udai Husein, hijo del presidente, sobre una 'cobertura árabe' para el trabajo de los inspectores: 'La resolución está ya aprobada y no hay nada que negociar a estas alturas', manifestó.

[Los 250 diputados iraquíes rechazaron por unanimidad, a mano alzada, la resolución de la ONU, tal como les recomendara la víspera la Comisión de Exteriores. Sin embargo, las decisiones de la Asamblea iraquí no tienen carácter vinculante y la última palabra corresponde al Consejo de Mando de la Revolución, que preside Sadam Husein. Nunca antes el Parlamento y la dirección iraquí se han manifestado de forma contradictoria, pero todas las fuentes consultadas se muestran convencidas de que alcanzarán un compromiso y Bagdad terminará por aceptar la resolución, informa Ángeles Espinosa. 'Tenemos muy poco margen de maniobra', reconocio a este diario una fuente diplomática iraquí, 'pero los diputados han expresado el malestar de los iraquíes por una resolución que atenta contra su dignidad'.]

Bush y su Administración desplegaron su habitual belicosidad verbal contra el Gobierno de Bagdad. El presidente repitió una frase que pronuncia casi diariamente: 'Si Sadam Husein no cumple la resolución, encabezaremos una coalición para desarmarle'. El ministro francés de Exteriores, Dominique de Villepin, afirmó también que si el presidente iraquí no acepta cooperar con los inspectores, habrá una guerra contra Irak.

Irak ha encargado en Turquía grandes cantidades de un antídoto contra los efectos del gas nervioso, en su mayoría a proveedores turcos, según altos funcionarios estadounidenses citados ayer por The New York Times. Se trataría de un pedido de un millón de dosis de atropina y sus correspondientes jeringuillas.