Netanyahu rechaza un Estado palestino al jurar como ministro
El ex primer ministro Benjamín Netanyahu, 53 años, uno de los halcones más agresivos del partido nacionalista Likud, es desde ayer el nuevo jefe de la diplomacia israelí, tras lograr que 61 diputados del Parlamento votaran a favor de su nominación y tras jurar su cargo ante el primer ministro, Ariel Sharon.
Netanyahu declaró solemnemente que se opone a la creación de un 'Estado terrorista palestino' al lado de Israel. Y recalcó que ello no sucederá si se convierte en el nuevo jefe de Gobierno en las elecciones anticipadas, que se celebrarán a finales de enero o principio de febrero.
Su declaración es un viraje de 180 grados con respecto a la política de su antecesor, el laborista Simón Peres, uno de los artífices de los Acuerdos de Oslo y defensor de la creación de un Estado de Palestina. También contradice las declaraciones que a favor de un Estado palestino había hecho horas antes Sharon, en un intento de tranquilizar a la Casa Blanca.
Una vez investido ministro de Exteriores, Netanyahu se reunió para negociar con Sharon dos fechas clave en el proceso electoral israelí: la convocatoria de las elecciones y la celebración de las primarias, en las que debe elegirse el cabeza de lista del partido Likud. Sharon propugna una convocatoria inminente para aprovechar los sondeos favorables.
Por otra parte un militante de Hamás, vecino del campo de refugiados de Jan Yunes, logró infiltrarse ayer en el interior del asentamiento de Shalev, al norte de la banda de Gaza, donde asesinó a dos colonos. El autor de los disparos fue abatido por un soldado, cuando trataba de huir.
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