22@ 'Al 22@ del Poblenou le hace falta un gran esfuerzo de promoción'
En 1967 puso a la venta el primer ordenador, desde la empresa Telesincro, y luego una máquina que tejía jerséis pero con un ordenador como controlador. Joan Majó, presidente in péctore de la sociedad municipal 22@ -creada para potenciar la transformación del suelo industrial del Poblenou en un distrito especializado en nueva economía-, ha sido la persona escogida por el alcalde de Barcelona, Joan Clos, para dinamizar el proyecto.
Ingeniero de profesión, Majó, de 63 años, cuenta con una amplia experiencia en el sector de la tecnología y de la informática. Prácticamente toda su vidase ha dedicado a ello, salvo el periodo en que se dedicó a la política, primero como alcalde del PSC en Mataró (entre 1979 y 1982), después como ministro de Industria (de 1985 a 1986) en uno de los gabinetes socialistas. A su regreso, presidió Olivetti y más tarde fue asesor de la Comisión Europea, a la que sigue vinculado. El encargo de impulsar el 22@ le llega cuando sigue enfrascado en proyectos ligados a la tecnología. Majó tomará las riendas de un plan ambicioso pero que no acaba de despegar. Para algunos, el proyecto está enfermo.
El plan va despacio porque no puede sustraerse a la crisis financiera mundial
Pregunta. Si el 22@ está enfermo, ¿usted será el especialista encargado de ponerlo en forma?
Respuesta. Yo entiendo que empieza una segunda etapa. La primera, y necesaria, era la transformación urbanística, para lo que se ha tenido que modificar el plan metropolitano (PGM). Ahora eso ya se ha acabado y estamos en una etapa que pide otro tipo de gestores. Ahora no es urbanismo, sino impulso de promoción. Hace falta un gran esfuerzo de promoción.
P. Un titular de la prensa de ayer decía: La industria española de telecomunicaciones registrará en 2002 el peor año de su historia. ¿No es un mal momento para intentar reactivar el 22@?
R. Ése es el reto. Si este proyecto se hubiera puesto en el mercado hace tres años, la promoción habría sido automática. Es cierto que el 22@ no va deprisa. Pero si eso ocurre es porque no puede sustraerse a la economía mundial, y más todavía en este sector. Lo interesante es hacer otra reflexión: si el 22@ hubiese arrancado hace tres años, ahora, en vez de tenerlo más bien vacío, lo tendríamos lleno de cadáveres. Insisto en que las empresas que vengan al 22@ serán las sólidas y nos ahorraremos las burbujas de humo, que dan alegrías inmediatas y luego grandes decepciones.
P. En la superficie por transformar en el 22@ se han aprobado seis planes especiales promovidos por la iniciativa pública, pero entre los impulsados por el sector privado predominan el sector terciario y los servicios. Lo que se entiende por actividad @ es más bien escaso. ¿Cómo se pueden invertir los términos?
R. Todo lo nuevo tiene fronteras difíciles de delimitar. Para mi el concepto @ son empresas que trabajan, sobre todo, en la gestión del conocimiento. Y la frontera entre la nueva economía y el sector de los servicios es muy difusa. Es más, ese tipo de actividades van ligadas. En la modificación del PGM, cuando se hizo la lista de las empresas que se consideran @ fue amplísima. Yo quiero insistir en que un país o una zona, cuando entra en la economía del conocimiento, no significa que todas hagan cosas completamente nuevas. Son empresas clásicas pero que cambian su sistema de trabajo y de producción, y eso las acerca al sector @. La nueva economía no es sólo las empresas .com o las telecomunicaciones.
P. Por ejemplo, ¿una imprenta?
R. Naturalmente. Antes eran las linotipias y ahora son ordenadores y máquinas de fotocomposición. Como ésta, hay más. Se trata de empresas antiguas con nuevos sistemas de producción. Debemos tener una visión extensa de lo que es la nueva economía.
P. ¿Qué tiene que hacer el 22@ o Barcelona para captar empresas sólidas y con buenos proyectos?
R. En Europa y cada vez más en Asia, la marca Barcelona vende. Yo tengo la experiencia del European Institut for the Media . Hacemos reuniones en distintos puntos de Europa promocionando la televisión interactiva y habitualmente asistimos unos 200 o 250 profesionales. Si la reunión es en Barcelona, asisten 400.¿Por qué? ¿Porque les gusta el turismo? Tal vez. El caso es que creen que hay que venir a ver qué pasa en Barcelona. Hay atracción social como destino turístico, pero también empresarial porque lo que se busca es un entorno con una cierta calidad de vida con capacidad de negocio. Y eso Barcelona lo tiene y es lo que tenemos que saber explotar. La concentración en ese tipo de sector atrae.
P. ¿Por dónde empezará?
R. Bueno, todavía no he sido nombrado por el Consejo de Administración y ni siquiera he estado en la oficina. Pero como he vivido en los últimos años el problema del mercado tecnológico, creo que el 22@ se irá consolidando. No será al ritmo que se pensaba hace cuatro años, con aquella dinámica increíble de que cada día aparecían 25 empresas nuevas que luego desaparecían. Esa fiebre es lo que ahora se está depurando.
P. ¿Formará un equipo de captación de empresas?
R. No lo puedo asegurar, pero eso será probable porque hay que reforzar mucho más la promoción.
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